En un partido muy complicado en la previa, Leo Mayer logró jugar a un gran nivel durante la mayor parte del primer set, aprovechando la velocidad de pelota que proponía la superficie y tapando las potentes derechas de Tomas Berdych. El tenista correntino logró, a fuerza de grandes devoluciones, quebrar el saque del checo en el séptimo juego para sacar 4-3, pero una serie de puntos en ese game de servicio del argentino, luego de un smash errado, permitieron que el número 5 del mundo retome su nivel y recupere el quiebre. Mayer se nubló tras ese punto malogrado y le cedió chances al top ten que cerró el set a su favor por 6-4, en 45 minutos.

El segundo set se presentó aún más parejo que el primero, con un Berdych sólido y un Mayer a la altura de las circunstancias. El argentino consiguió un quiebre tempranero en el segundo game para sacar 2-1 y mantuvo la ventaja hasta el octavo juego, donde dejó crecer al checo y perdió el saque. Sin embargo la tranquilidad le duró poco al local, ya que perdió instantaneamente su juego de servicio y volvió a cederle la ventaja al correntino, que no desperdició la oportunidad y pudo, con su saque, abrochar el segundo set por 6-4.

En el tercer set, Berdych se vió favorecido desde el inicio, ya que un mal game de saque de Mayer, en el segundo juego, le permitió estar arriba en el resultado a lo largo de todo el set. Mayer bajó notablemente su rendimiento en esa instancia del encuentro y cuando recuperó el andamiaje, el tenista local ya poseía una gran ventaja. Berdych ganó el tercer set por 6-3 tras poco más de media hora, casi sin mucho esfuerzo luego del quiebre conseguido.

En el cuarto set, Leo Mayer volvió a ceder su saque, esta vez en el primer game, y nuevamente entregó chances claves a su rival. Berdych aprovechó esta ventaja, cuidó sus juegos de servicio y sacó bien en momentos importantes para cerrar el set por 6-4 y poner a República Checa en una posición inmejorable de cara a la jornada del sábado.

En poco más de tres horas de partido, Mayer mostró que está a la altura de los grandes tenistas del mundo, sin embargo necesita mantener una regularidad constante en los partidos largos. Berdych jugó un partido regular, no mostró destellos de ser número 5 del mundo pero le alcanzó para llevarse el partido.

Mañana a partir de las 9:00 en el O2 Arena comenzará el dobles que enfrentará a Berlocq y a Ceballos contra Stepanek y Berdych. Será la última chance del equipo argentino para seguir con vida en la serie.