Roger Federer conquistó ayer el último de sus 18 Grandes Torneos y cortó una sequía de casi 5 años sin ganar uno de estos Torneos y de pasó aprovechó para ganarle por primera vez en la historia a Rafael Nadal en Tierras australianas.

A sus 35 años "Su Majestad" volvió no solo a las canchas sino a levantar un trofeo grande, si bien el suizo ostentaba el récord de Grand Slam ganados, el último había sido en Wimbledon 2012, frente a Andy Murray por 4-6, 7-5, 6-3 y 6-4.

A partir de ahí el suizo comenzó una caída libre que lo llevó a estar Nº 17 del Ranking y aunque pareciera al alocado, pensaba más en el retiro que en su futuro y mucho menos pensaba en levantar otro Grand Slam; sólo intentaba mantenerse en la primeras planas y tratar de ganar Torneos para sumar puntos.

Roger Federer, que hasta hoy contaba con 4 Australian Open, 1 Roland Garros, 7 Wimbledon y 5 UsOpen, se sacó una espina gigante y demostró que su magia todavía es capaz de lograr cosas impresionantes en el alto nivel.

En 2012, Roger sin dudas se encontraba en uno de sus picos altos de su carrera: dejaba atrás a Michael Yohuzny en tercera Ronda y en la cuarta ronda derrotaba a Yarko Nieminen, como para no ser menos derrotaba al campeón vigente en las semifinales, Novak Djokovic y para enarbolar más su victoria, le ganaba al local y máximo favorita a quedarse con el título Andy Murray, quién veía como se le escaba otra chance de sumar su primer Grand Slam. 

Luego de ese 7mo Wimbledon, Roger Perdió tres Finales a manos de Novak Djokovic y tropezó con Marin Cilic en otra. Todo indicaba que no conseguiría nunca más un título de esta características, pero como siempre, "El Rey" sorprendió a todos  y ante Rafael Nadal levantó nada más y nada menos que su 18vo Grand Slam y su 5to en el Melbourne Park.