Sobre el polvo de ladrillo, Andy Murray venció al rumano Marius Copil (n°104) por 6-4 y 6-3 y avanzó a tercera ronda del Masters 1000 de Madrid, uno de los platos fuertes del mundo del tenis previo al Roland Garros.

El partido comenzó bastante parejo, en donde los dos ganaban sus propios servicios. No hubo muchas emociones en general, salvo cuando Murray quebró el saque del rumano y se quedó con el primer parcial. Con festejo y grito incluido, dando a muestra que la bestia había despertado. Podemos apreciar ahí, en esa reacción, un parelelismo con el tenista español Rafael Nadal. El mallorquín cuando se encuentra en un poso a nivel deportivo necesita de un punto clave para recobrar su confianza, y si te mete puño no hay vuelta atrás. Así de igual fue con el británico, que cerró el set de manera holgada.

Murray arrancó muy bajo y en lejos sintonía con la pelota, lo que logró que Copil se sintiera suelto y probara variantes de tiros para incomodar al número uno. Al nacido en Arad ya se le notaba un poco el desgaste físico realizado en su victoria ante el español Guillermo García López en donde hubo dos tie breaks.

La segunda manga tuvo una variante: el envión emocional del ultimo punto de Murray logró tirar la balanza de su lado. Por lo menos en su servicio, porque cuando le tocó sacar a Copil respondió con igual intensidad que en el primer set. Palo y palo entre los dos llegaron a la igualdad en 3. Punto de quiebre del partido. De allí en adelante, apreciamos un monologo de Andy, de esos que el nos tenía acostumbrado cuando estaba en su plenitud. Hoy, tras volver de sus lesiones y molestias de muñeca, empieza a asomar ese nivel tenístico superlativo y superior, por lo menos por un escalón, al resto.

Con una serie de winners y voleas, Murray dio en la tecla para conseguir el segundo parcial y el partido. Copil se fue de la cancha algo decepcionado por razones obvias, sin embargo, no hay desmerecer lo que el tenista de 26 años logró, pelearle mano a mano un set al mejor jugador del ranking ATP. Se encuentra lejos del ranking y no arrancó el año de una buena manera (de 11 partidos jugados en el año ganó cuatro y perdió siete).

En tanto, Andy Murray avanza en el cuadro superior y espera su rival que aún no esta definido. El mismo saldrá del duelo entre Berna Coric (n°59) que ingresó al torneo de la capital española como 'lucky looser' y el ganador del duelo francés entre Lucas Pouillie (n°13) y Pierre-Hugues Herbert (n°88).