En la primera semifinal de Montecarlo, el partido se dividió en dos partes, la primera fue de un ritmo tremendo, donde Dimitrov jugó un gran tenis y por momentos hacia algo que parece imposible, complicar a Rafa en la arcilla. En la segunda parte el búlgaro jugó prácticamente desconectado, sin ritmo, le hizo todo fácil a Nadal y cuando se le da un milímetro Rafa te liquida.

Un primer set difícil para Rafa

Nadal no la tuvo fácil en la primera manga, Dimitrov jugó con precisión, le jugó a las líneas y eso complicó en gran parte de ese parcial al español.

Desde el primer juego, Nadal no la pasó tan bien como la venía haciendo a lo largo del torneo, el búlgaro a diferencia de sus anteriores rivales se le puso enfrente y lo puso a correr

Tras intensos peloteos, donde el ataque y el contraataque era una virtud de ambos, comenzaron rápidamente los puntos de quiebre. El primero que se quedó con el saque de su rival fue Rafa, que tras un tremendo revés y definiendo dentro de la cancha sacó ventaja en el juego de saque inicial del búlgaro. Con el 2-0 a su favor, parecía que la película de ayer contra Thiem volvía a revivirse, pero Dimitrov estaba encendido estaba desfachatado, irresponsable de jugarle en su propia casa a Nadal, no dejándolo pegar cómodo y tras estar 3-0 abajo, pasó a igualar las acciones en tres.

Grigor mantenía su constancia, no se desconectaba en los peloteos largos, y eso era fundamental para sostener a la fiera enjaulada. Pero en el cambio de lado del noveno juego lo Dimitrov se desconectó, fue como si se le hubiera acabado la batería y empezó a errar. Cometió dos dobles faltas, tiró dos derechas afuera y eso le permitió a Nadal meterse más aún en el partido y con un revés cruzado liquidó el primer set, tras una hora de intensos peloteos.

Se desconecta Dimitrov

La segunda manga, fue un entrenamiento con un muñeco, porque Grigor prácticamente no jugó. Inexplicable desde el punto de vista que se le vio cansado, sin ritmo, no sosteniendo el mismo juego del primero y así fue que Nadal lo terminó liquidando en menos de treinta minutos por 6-1.

La intensidad de Rafa es cada vez más tremenda, no leogran quebrarle la muñeca, le juegan de todas las formas, inventan estrategias para plantearle los partidos, pero es imposible, y es una incógnita cunado se piensa en quien puede ganarle en arcilla. No muestra matices de irregularidad, juega de la misma manera el tiempo que dura el partido y siempre termina resolviendo de la mejor manera el planteo de su rival.

Nadal espera en la final por el ganador de Alexander Zverev y de Kei Nishikori, ambos jugadores van a llegar con un tremendo desgaste, ya que los dos tuvieron que jugar casi todos los partidos a tres set, y con la dinámica que impone Rafa, es muy difícil que en la final que haya partido.