En San Petersburgo todos los caminos conducían a una victoria del suizo Stan Wawrinka, esa sensación estuvo presente hasta la mitad del segundo set donde tenía todo dominado.

El suizo había hecho bien su trabajo, controlaba con la derecha al rival y lo liquidaba con su revés. Un Klizan que estaba contrariado, sin rumbo, pero enojarse al eslovaco le vino bien, porque empezó a tirar, le quebró la defensa a Wawrinka y lo puso a trabajar. En ese rubro todavía el suizo no está para correr tanto y Martín que estaba prácticamente haciendo los bolsos una hora atrás, se quedó con el pasaje a las semifinales del torneo.

El primer parcial, fue todo del suizo, dominó desde todos los aspectos, con un elevado porcentaje de primero saques y de puntos ganados con el mismo, a Wawrinka solo le bastó quebrar en el primer juego del set, para luego dominar con autoridad. Por ello rápidamente cerró la primera manga por 6-4.

En el segundo set, todo era del suizo, aunque no lograba quebrar, lo tenía en vilo al eslovaco que no conseguía construir su juego. Pero Klizan se enojó, y a los que a varios les resta enojarse, a Martín le sumó y desde ahí fue un animal. Le pegó con autoridad, se metió dentro de la cancha y de estar a punto de perder su servicio, logró cinco puntos consecutivos, le quebró el saque al suizo y desde ese quiebre, Klizan sostuvo su saque y mando el partido a un tercer set.

El tercero fue un partidazo, por los dos expusieron su categoría y al final lo ganó quien tenía mucho más resto. El eslovaco fue el primero en quebrar el saque, ya Wawrinka no estaba tan fino con su servicio y eso le permitía a Klizan poder moverlo. Tras el quiebre en contra Wawrinka, igualó el partido gracias al poder inhumano de su revés, porque con tres aplicaciones con ángulo lo dejó prácticamente parado al eslovaco.

Pero el resto físico del suizo todavía hay que trabajarlo y Klizan que estaba muy fino con el drive, lo puso a correr, quebró en el undécimo juego y cerró en el duodécimo para llevarse el partido por 7-5 en el tercer parcial.

Un atractivo partido, con dos jugadores de extrema categoría. Klizan solo debe estar más enfocado para llegar más arriba en el ranking, tiene todas las condiciones para ser top 20, pero solo depende del eslovaco.