Luego de tener un gran y agotador debut ayer, Carlos Berlocq quedó eliminado ante Tomas Berdych por 6-3 y 6-4 en el Masters 1000 de Roma. El checo ahora tendrá un día de descanso y recién volverá a jugar el jueves, posiblemente, ante Milos Raonic.

Bajo el agotador sol romano y unos 27 grados, Charly (68°) comenzó el partido desgastado fisicamente por su anterior compromiso ante el holandés Robien Haase (6-3 y 7-5). Sin embargo, él sabía como jugarle al checo: utilizar su derecha bien alta y evitar ese mismo lado de Berdych (13°). Además, al comienzo del partido empezó a evidenciar con lenguaje corporal que no se sentía del todo cómodo dentro de la cancha. Para infortunio del argentino, el checo tuvo un arranque demoledor, explotando su drive con varios tiros ganadores logró un 3-0 -12 a 1 en puntos- en pocos minutos.

Utilizando su tiro predilecto, Berdych fue quien se quedó con el protagonico del primer set. Sin discusión alguna. Dentro de toda la supremacía del europeo, Berlocq rescató un par de games a puro esfuerzo. Su estandarte. Esa bandera que siempre utiliza cuando el partido es cuesta arriba, cuando todas las pelotas le quedan más y más lejos. Siempre la ecuación es: su esfuerzo físico por sobre su tenis.

Tras 35 minutos de exclusividad de Berdych y un muy buen set, Berlocq intentó cambiar el chip con el que habia entrado a jugar el primer parcial. Con unos golpes más fuertes e incluso con movimientos con mayor soltura, el argentino podría haberlo sacado adelante, ya que su rival, a pesar de estar en un gran nivel, caminaba muy lento la cancha tal cual a como se mostró contra el alemán Mischa Zverev, su primer rival.

El compromiso de Charly se notaba cada vez más. Sintoma de que ya estaba realizando un esfuerzo aún superior al que podía hacer. Gritos altos y largos tanto en sus saques como en sus devoluciones evidenciaban el cansancio con el que terminó el partido. A pesar de la poca fuerza que le quedaba emparejó el partido, aunque sin recompensa, porque Berdych le quebró y confirmó su saque, que lo dejó con el partido servido.