El brasileño Gilbert Durinho Burns tuvo la mejor performance de su carrera y derrotó por decisión unánime, al estadounidense y ex-campeón de las 170 libras, Tyron Woodley en el combate estelar del  Fight Night que se desarrolló en el UFC Apex de la ciudad de Las Vegas, Estado de Nevada. Con esta victoria, Durinho acumuló su quinto éxito en fila y quedó a un paso de una pelea por el cinturón de la categoría welter, cuyo titular es el nigeriano Kamaru Usman.

El trámite de la pelea comenzó con una salida agresiva de Burns desde el primer segundo y tras una buena combinación de golpes y un rodillazo, llevó el trámite a ras de lona, donde dominó a Woodley a base de martillazos, codos y luego, un excelente control desde la guardia montada. El estadounidense culminó el primer asalto con un corte profundo en el ojo izquierdo, debido al gran castigo que le propinó el brasileño.

Durante los siguientes asaltos, Durinho controló el combate en todos los aspectos: mostró una enorme labor en el manejo de la distancia, ejecutó todo el tiempo patadas a las piernas y jabs de izquierda y realizó excelentes derribos para trasladar la pelea al piso (prueba de ello el excelente derribo a dos piernas del segundo round). Mientras que a Woodley se lo notó falto de ritmo y más allá de alguna combinación de golpes esporádica en el inicio de las vueltas, fue dominado completamente por Burns durante los 25 minutos de combate.

En el último asalto, Burns manejó el trámite ante la necesidad de Woodley de buscar una finalización para ganar el duelo. El brasileño tuvo el control del octágono y a base de patadas, llevó a The Chosen One contra la reja, que poco pudo hacer ante la inteligencia de su rival para evitar cualquier tipo de reacción de su parte.

Foto: Jeff Bottari - Zuffa LLC
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Las tarjetas de los jueces fueron contundentes: Sal D'Amato y Derek Cleary marcaron 50-44, con un 10-8 en el primer round, mientras que Eric Colón vio la pelea 50-45. Gran victoria para Gilbert Burns, que en la entrevista post-combate pidió por una contienda por el título ante el campeón y compañero de entrenamiento, Kamaru Usman.

Lo más destacado del resto de la cartelera

En la contienda co-estelar del Main Card, el brasileño Augusto Sakai le ganó por decisión dividida al búlgaro Blagoy Ivanov, en una pelea de peso pesado que rápidamente quedará en el olvido. El enfrentamiento tuvo un trámite aburrido y prácticamente sin emociones, donde Ivanov conectó los mejores golpes en el asalto inicial, pero luego Sakai dominó en base a sus low kicks y algunas buenas combinaciones.

Foto: Jeff Bottari - Zuffa LLC
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En los guarismos, dos tarjetas favorecieron al brasileño por 29-28, mientras que la restante vio ganador al búlgaro con un controversial 30-27. Cuarta victoria para Sakai en UFC en igual cantidad de presentaciones, que lo dejarán bien ubicado en el escalafón de la categoría.

En el duelo de peso paja que abrió la cartelera principal, Mackenzie Dern volvió al triunfo, tras someter con una palanca de rodilla Hannah Cifers en el primer round. Luego de un arranque en el que Cifers apostó por su boxeo y un rápido traslado por el octágono, Dern derribó a su rival, llevó la pelea al piso y la obligó a tapear, para obtener la primera sumisión de piernas en la historia de UFC en las categorías femeninas. Dern fue la ganadora de una de las bonificaciones por ''Performance de la noche''.

Además, en la mejor pelea del evento, ganadora de tal bonificación, el debutante en la empresa y ex-campeón mosca de LFA (Legacy Fighting Alliance), Brandon Royval sometió al experimentado Tim Elliott con un triángulo de brazo en la segunda vuelta, en un enfrentamiento en las 125 libras. Luego de un arranque en el que Elliott fue superior y casi logra finalizar, Royval dio vuelta la cuestión y se quedó con la victoria con una gran definición.

Main Card