Con la marcha de Paul George, los Pacers parecían abocados a una reconstrucción. Traían a dos jugadores que parecían mediocres, Oladipo y Sabonis (hijo). Muchos decían que era un atraco, sin embargo, casi un año después, las cosas han cambiado. 

Por un lado, Oladipo se ha destapado como una estrella de la liga. El jugador, un defensor feroz y anotador en los momentos clave, ha resultado clave para dar otro aire al equipo de Indianápolis, y llevarlos a playoffs cuando nadie se lo esperaba. Incluso en la postemporada, llevaron a los Cavaliers a un séptimo partido en el que pudieron ganar en cualquier momento, y haber pasado de ronda. 

Los Pacers han acabado una temporada de forma satisfactoria. Ahora toca el momento difícil, mantener a sus jugadores y confiar en sus jugadores jóvenes y prometedores, ayudados por veteranos de prestigio. El núcleo formado por Oladipo, Miles Turner y Sabonis puede traer muchas alegrías en ese estado

Por ello, tienen puesto la vista en reforzar el puesto de alero. Y uno de los aleros clave de este mercado es Aaron Gordon. El jugador ha completado una temporada bastante decente, y tiene un físico y unas capacidades atléticas que hacen soñar con que siga creciendo. Está desarrollando un buen tiro exterior y habilidad con el balón en las manos. Los Pacers podrían ofrecerle algo más de 20 millones al año. Pero hay varios problemas. El primero es que es agente libre restringido. O sea, que cualquier contrato que firmase, los Magic podrían igualarlo y quedarse con él. Además, Gordon ha declarado en varias ocasiones que no estaría dispuesto a aceptar menos que un máximo. Y el equipo que más dinero puede darle son los Orlando Magic. 

Por todo esto, se antoja difícil que el jugador abandone Orlando rumbo a los Pacers. Aún así, los de Indiana parecen decididos a ponerle el mejor contrato que puedan ofrecerle y esperar que nadie le ofrezca tanto.

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Sobre el autor
Sergio Gonzalez
Escritor novel. Amante de la NBA.