Es de esos jugadores que no necesita correr mucho para saber dónde tiene que ubicar el balón y en qué momento justo tiene que hacer el lanzamiento para su compañero. Sí, quizá en varias ocasiones se equivoque durante el partido, pero en la gran mayoría de momentos acierta, no sólo haciendo pases, también acompañando la jugada por si requiere finalización, o segunda jugada.

Sí, precisamente ese es Macnelly Torres, quien dirigió los ataques y tiempos de su equipo contra Delfín, equipo que por más que quiso marcarlo, no encontró la manera de referenciarlo, ni cerrándole los espacios, pues cuando sucedía lo anterior, el volante barranquillero siempre encontró a un compañero para desahogar la jugada.

Y así fue como llegó el segundo gol del partido. Macnelly Torres entendió a la perfección la jugada que inició el lateral izquierdo, Rafael Delgado con Gonzalo Castellani y Vladimir Hernández. El volante barranquillero tocó de primera para Dayro Moreno, jugador que hizo un taco para Hernández, quien le pasó el balón a Reinaldo Lenis para que definiera al palo derecho del arquero, Dennis Corozo.  

La situación fue diferente para el tercer gol del partido, porque en esta ocasión Torres fue el jugador encargado de definir ante el golero ecuatoriano, luego de una excelente combinación entre Jorman Campuzano, Reinaldo Lenis y Helibelton Palacios, este último le pasó el balón a Dayro Moreno, quien hizo el amague de entrar en la jugada para dejar pasar el balón hacia Macnelly.

El cuarto y último gol llegó luego de un cobro de tiro de esquina del enganche ‘verdolaga’, que no dudó en hacerlo rápido para sacar provecho de lo mal ubicada que estaba la defensa visitante. Reinaldo Lenis, jugador que marcó en la victoria 2-0 contra Alianza Petrolera, controló el centro, remató y ubicó el balón en el primer palo del arco visitante.

Puede que Macnelly Torres no esté jugando en la posición que lo caracteriza, pero el volante barranquillero sigue demostrando que eso no es problema para poner el balón en el momento justo y adecuado que lo requiere la jugada y su compañero.