Héctor Cárdenas no me parece que sea un mal técnico, y menos para el Deportivo Cali. Los verdiblancos tienen una nomina en su gran mayoría conformados por jugadores jovenes que van en ascenso, y en parte también por veteranos que le aportan experiencia al equipo; por esto, se presume de que el director técnico debería ser alguien que conozca los procesos de estos muchachos e intente potenciarlos, o sea, un técnico que sea de la cantera. Este es Héctor Fabio Cárdenas Berrio.

Cárdenas tiene 35 años, uno más que Andrés Pérez, y dos más que Sergio Herrera. Es el técnico más joven del Fútbol Profesional Colombiano. Sus ideas gustaron en un principio, y pese a no lograr nada en los primeros seis meses del año calendario, la Junta Directiva mantuvo la confianza en él. Estos últimos meses mostró un gran trabajo, incluso llevando al Deportivo Cali a pelear el líderato en las primeras 10 fechas. Pero la eliminación de la Copa Sudaméricana contra Peñarol fue lo que echó a perder el resto de temporada.

El Deportivo Cali quedó eliminado de esta competición internacional después de jugar la fecha 10. Las ocho fechas que siguieron hasta finalizar el todos contra todos, el Cali ganó dos partidos, perdió cuatro y empató dos, sumando 8 unidades. La moral y los resultados del equipo se vinieron abajo. Ante esto, Cárdenas decidió hacer ciertos cambios desde la jornada 14, que al principio parecieron funcionar, pues ganaron dos partidos, pero encajando cinco goles entre los dos. 

Cambios que afectaron el rendimiento del equipo

Hubo cambios que se tuvieron que hacer por lesión, y otros por decisión técnica. De los más errados: quitarle el puesto al guardameta Luis Hurtado, que tuvo un gran rendimiento, exceptuando los últimos dos partidos que atajó, y poner a Jose Johan Silva, que tuvo un pésimo rendimiento. Los números no mienten. Hurtado en 14 fechas encajó 17 goles y Silva en las 8 fechas que atajó (y las más decisivas) encajó 18 goles.

Víctor Giraldo ocupó la posición de lateral derecho los últimos partidos. Helibelton Palacios, quien fuese el dueño del puesto, fue cambiado de puesto y ahora hace línea de tres con Cabezas y Pérez. Giraldo no es un gran jugador, era la tercera opción para el lateral derecho después de Palacios y Candelo. La mala labor de los laterales desencadenaron en varios goles en contra para La Amenaza Verde.

Ni Miguel Caneo, ni Luis Fernando Mosquera, ni Carlos Lizarazo jugaron como debían y por esto fueron excluídos. Los tres le daban control al balón en el centro del campo, y hacían que el Cali no perdiese la pelota tan fácilmente como hoy en día. Con la exclusión de estos tres jugadores, Yerson Candelo que se venía desempeñando de gran manera como mediapunta izquierdo, pasó a ser un volante diez fijo.

Nasuti Mera, la pareja de centrales del Deportivo Cali, son defensores corpulentos y por ende, lentos. Pérez y Cabezas no volvieron a ser los mismos desde hace un tiempo, y esto combinado con la poca labor defensiva de los laterales, terminó en esta catastrofe de defensa. 

El Cali estuvo solido en ataque en los últimos partidos, pero estuvo pésimo en defensa. Es un equipo que ataca pero que no defiende. Héctor Cárdenas tendrá dos partidos de transición y la pretemporada siguiente para pensar los cambios que hará, y probarlos en partidos así, que no tienen valor, y no en los últimos 8 partidos de la Liga Postobón, que siempre resultan siendo los más importantes.