El único remate al arco durante todo el partido fue del experimentado Gerardo Bedoya al minuto 54 de juego. Por la vía de la pena máxima el conjunto local abrió el marcador, en un pobre partido en cuanto a emociones se refiere.

Tanto el Cúcuta Deportivo, como los dirigidos por Eduardo Lara, mostraron muy poco fútbol. Durante el primer tiempo no se registró ningún remate a los arcos de Luís Estacio y del debutante uruguayo Michael Etulain. La mayoría del tiempo la pelota estuvo controlada en medio campo por el Cúcuta, quien no atacaba, pero tampoco regalaba espacio al rival para que lo atacase.

El Boyacá Chicó solo había anotado un gol en lo que va de la Liga Águila, fue el marcado por Yesid Aponzá al Deportes Tolima en la primera fecha de la Liga Águila, partido en donde el conjunto ´ajedrezado´ perdió 4-1 en Ibagué. Por otro lado el equipo de la frontera sumó su segundo empate en lo que va de la Liga Águila, ambos han sido en condición de local.

En el transcurso del segundo tiempo, el partido fue controlado por un conforme Cúcuta; tocaban el balón con muy poca profundidad y eficiencia de cara al gol. El profesor Eduardo Lara trató de darle una cara nueva a su equipo utilizando un par de recambios ofensivos, los cuales no pesaron mucho en el partido, pero por lo menos empezaron a generar juego por las bandas, e inquietaron al local con centros que nunca tuvieron un finalizador ´ajedrezado´. Fue finalmente la cabeza de Eduar Caicedo, defensor del Cúcuta, la que permitió el empate del visitante al minuto 82 de partido.

En líneas generales, los dos hicieron casi nada por llevarse los tres puntos, aunque el local hizo un poco más por el resultado, aunque si no fuera por ese penalti y ese autogol, habría sido complicado celebrar algún gol en esta tarde calurosa en el General Santander.