A pesar de la gran expectativa que se tenia con los nuevos refuerzo del Atletico Huila, dejaron una gran brecha de interrogantes de lo que se esperaba del equipo. Podemos iniciar diciendo que fue un juego muy mal planteado por el técnico Santa, ya que los jugadores se vieron sin ánimo y sin ganas de llegar al objetivo, que era hacer goles y ganar el compromiso, sin embargo, si somos objetivos, el técnico no cambió mucho la forma de jugar.

¿Pero entonces qué pasó?

Se sintió muchísimo el cambio en la defensa del equipo, por el liderazgo que imponía Jhon Lozano y adicionalmente lo que siempre le ha faltado al equipo, un volante de creación, que arme diferentes opciones de gol. Por otra parte, Patriotas fue un gran rival, que se paró muy bien en la cancha y que fue concreto al marcar los goles; pero se podía cambiarle la cara al juego. La inexperiencia de los jugadores cobró muy duro el partido y de ahí vemos los resultados.

Podemos decir que falto empeño por parte de los jugadores, ya que faltó el juego en bloque y un entendimiento en la cancha. Jhonny Cano trató de llevar el liderazgo del equipo, y con esto deja una gran enseñanza, ya que se gana es jugando y no con lo que se hizo en el semestre pasado. Además, no sabemos que pasó con los entrenamientos y los juegos amistosos que se tuvieron en la pretemporada, para detectar éstos y otro más errores.

Con un equipo de jovenes futbolístas, se debe iniciar con empezar a mentalizarlos, que ganando y logrando los objetivos se logran muchas cosas. El Atlético Huila es un equipo que nunca ha perdido la esperanza de ganar su primera estrella y el técnico lo sabe muy bien, la hinchada solo espera que esta semana se logre solucionar los errores y el próximo partido que será ante Jaguares en Montería, se logre ver la verdadera casta opita.