Partido inusualmente parejo contradiciendo la historia de los duelos Millonarios - Junior en Bogotá, con un conjunto barranquillero proponiendo en ataque a sabiendas que los locales tenían una zona defensiva improvisada debido a la ausencia de Andrés Cadavid en la pareja de centrales, y Fabián Vargas en la zona de medio campo.

Por su parte, el juvenil Stiven Vega volvió a ser parte de la nómina titular de los azules tal cual sucedió en el clásico del pasado fin de semana, haciendo esta vez pareja de centrales junto a Osvaldo Henríquez, teniendo un rendimiento sobresaliente, constituyendo una de las nuevas promesas azules en una posición donde Millonarios a forjado más jugadores durante los últimos años.

Foto: AS Colombia

El tendón de Aquiles fueron los laterales Lewis Ochoa y Luis Mosquera, primero en su casi nula contribución al ataque perdiendo constantemente los duelos personales. Segundo, con las malas entregas que dejaron al equipo mal parado en defensa, facilitando el ataque rápido de hombres como Vladimir Hernández y Jarlan Barrera. Por último, el desequilibrio más importante se dio precisamente con la expulsión de Mosquera, quien con una acción infantil golpeo a dos rivales del Junior y vio la tarjeta roja a manos de Wilmar Roldán, cuando solamente unos instantes previos el equipo había recibido el primer gol en contra.

De allí en más, el orden y equilibrio exhibido en el planteamiento de Rubén Israel hasta ese momento se desvaneció, si bien el uno a uno llegó a los 25 minutos del segundo tiempo con autogol de Andrés Felipe Correa, el técnico sacrificó la marca sacando a Elkin Blanco como único volante neto de recuperación, haciendo ingresar a Jhonathan Agudelo, Omar Vásquez y Macalister Silva, quienes bien es sabido son de corte ofensivo más que defensivo, dejando desprotegido a Millonarios ante los ataques cada vez mas incisivos de Junior.

Finalmente y en un encuentro que en los últimos 20 minutos fue planteado al matar o morir, Millonarios con el gol justiciero del volante Guillermo Celis, perdió después de 11 años contra Junior en El Campín, recordando que la última vez fue en el 2004 con autogol de Iván López.

Vale la pena anotar que también cayó el invicto de 17 fechas como local que ostentaba sin perder el conjunto azul, dejando en entredicho a jugadores como Michael Rangel, quien tuvo quizás su partido mas opaco con la camiseta azul, Rafael Robayo, quien continua su tensa relación con los hinchas y Luis Mosquera, que además en otra de las controvertidas gestiones de la junta directiva, tiene contrato hasta 2017 con la institución embajadora.