El Deportivo Cali más allá de tener graves problemas defensivos, el equipo en la actualidad carece del poder goleador que los llevo a la obtención de la novena estrella. De aquel tridente goleador temido, poco queda en la ofensiva azucarera.
La sequía goleadora del Cali es preocupante, el equipo solo ha marcado tres goles en los últimos cinco partidos, de los cuales, solo uno ha sido marcado por uno de sus delanteros. Los otros dos tantos fueron marcados por el capitán Andrés Pérez en jugada de pelota quieta.
Adicional a lo anterior, el último tanto marcado por un delantero azucarero fue anotado de penal por parte de Harold Preciado en la goleada ante el Once Caldas.
Lo visto en el partido de ida de la Superliga Águila, es una muestra que los delanteros están necesitados de marcar. Preciado tuvo tres opciones de gol, Amaya contó con dos y Borré una sola.
Con la obligación de remontar un incómodo 0-2, el Cali viaja a Medellín con una estadística en contra. Como visitante en la temporada pasada, tenía un promedio de goles a favor de 1.62 y en contra de 1.71.
Del análisis de los últimos diez partidos oficiales del Cali, tenemos que Preciado ha marcado 5 tantos, Casierra uno solo y Santos Borré no ha marcado.
En síntesis, en los últimos tantos de los diez últimos encuentros del equipo azucarero se distribuyen así: Preciado con 5, Pérez con 2, Benedetti, Mera, Casierra, Nasuti marcaron una vez.
Además, es preocupante la ausencia en las pizarras de jugadores como Rafael Santos Borré y Andrés Felipe Roa. El caso de Borré es curioso dado que el jugador no se reporta como goleador en partidos oficiales desde el pasado 23 de julio en la goleada ante la Uniautonoma.
La pólvora esta mojada, el verdiblanco extraña a los hombres de su fórmula goleadora y es hora de despertar, ya que, el miércoles habrá una misión complicada que es remontar en Medellín y el inicio de la competición liguera.