El jueves 24 de noviembre de 2016, Nacional disputó su último partido por Torneos Conmebol. Recibió a Cerro Porteño en el Atanasio Girardot por la semifinal de vuelta en la Copa Sudamericana. En un empate sin goles, Franco Armani fue figura evitando claras oportunidades del equipo paraguayo, permitiendo así el paso de Nacional a la final, gracias a su gol de visitante anotado en el Defensores del Chaco.

Ayer, 14 de marzo de 2017, en el primer partido del ‘verdolaga’ como defensor del título de la Copa Libertadores frente a Barcelona de Guayaquil, Franco Armani volvió a ser figura. Todos los males que rondaban al equipo durante su participación en la Liga Águila salieron a flote en el Monumental Isidro Romero (casa del Barcelona), y aunque el invicto de siete fechas que lleva el equipo pueda decir otra cosa, la verdad es que Nacional tendrá que reconsiderar varios elementos de su juego.

Franco Armani soportó el rápido y potente ataque de los ecuatorianos, mientras que a la par sus diez compañeros se sentían confusos en el campo, con mala entrega del balón, precaria recuperación, y poco peso ofensivo. Esto permitió que Barcelona llegara con peligro al arco, fusilando, según las estadísticas, en nueve ocasiones al golero argentino.

A pesar de los dos goles en los cuales Armani no tiene tanta responsabilidad, siendo uno un cabezazo en tiro de esquina, producto de un desmarque de Bocanegra a Jonathan Álvez, quien ubica el balón al segundo palo imposible de parar. Y el segundo, un contrataque que dejó expuesta a la zaga defensiva de Atlético Nacional, que con un cambio de frente que recibe Marcos Caicedo (quien Bernal deja escapar), logra enfrentarse cara a cara con Franco y le remata fuerte y hacia arriba para decretar gol.

Quedaron para la postal los dos disparos que atajó en el minuto 34’, el primero llega por medio de un gran colectivo entre Arroyo y Álvez (figura del equipo local) que la defensa no logró controlar y dejaron a Arroyo de frente a Franco, quien contiene un fuerte remate a su cuerpo; y en el despeje, Pedro Velasco recibe sin marca y desde afuera lanza un veloz disparo al lado derecho de Armani que despeja con esfuerzo. Después, al 39’, Álvez volvió a inquietar con un disparo rápido y raso al césped que Armani rechaza, logrando inclusive recuperar el rebote que dejó. Esa fue la jugada en que casi se sale con el balón cometiendo tiro de esquina, pero que se hizo cargo de la situación.

En total, de los 9 remates a puerta, siendo dos de ellos gol, los siete restantes fueron en el primer tiempo. Lo que habla de una mejoría y mejor control defensivo de Nacional en la segunda parte. Ya después podemos hablar de la poca eficacia al arco, pues todos fueron disparos afuera por parte del actual campeón. De ahí una respuesta al 2-1 final.

Restará un mes hasta que Nacional vuelva a hacer frente por la Copa Libertadores. Habrá que trabajar bastante, y empezar a pensar si un cambio de módulo táctico es necesario. Tres partidos y dos fechas de eliminatoria (con posible convocatoria de jugadores ‘verdolagas’) estarán en el medio. Pero por ahora, menos mal que un santo venido de Casilda, sigue entre los tres palos de Atlético Nacional.