Mucho se discute, si ganar sin jugar vistoso, sin tener el ritmo del encuentro es bueno. Partiendo de esa premisa, contextualizamos el partido de este sábado con una gran frase del gran Andrés Iniesta. "Si uno gana sin sacrificio lo disfruta, pero es más satisfactorio cuando has luchado". Tal y como lo dijo, el crack de Fuentealbilla así se le dio el triunfo de este sábado al Deportivo Cali

El equipo de Gerardo Pelusso no llena por momentos, pero viene mejorando a paso firme. El comportamiento defensivo, uno de los karmas de las últimas temporadas poco a poco se va extinguiendo. Y es que sabíamos que Pelusso prima lo defensivo sobre lo ofensivo, y más en un equipo que venía de ser la peor defensa de todo el fútbol colombiano. 

Este sábado el Cali enfrentó a un clásico rival, Millonarios que viene de ganar la Liga y la Superliga, pero que es un equipo que se ha tenido que reconstruir en contra de la adversidad. La misma que tuvo que padecer desde el minuto 18, cuando Domínguez derribó a Benedetti en el área y el juez Murillo sancionó penal y expulsó al volante azul

Desde el punto blanco del penal, un duelo de quilates lo ganó el argentino José Sand quien con un remate cruzado superaba la humanidad de Wuilker Fariñez. La primera anotación del nueve argentino con la elástica verdiblanca

Los azucareros pudieron alargar su ventaja, pero errores en la definición de parte de Nicolás Benedetti y Jhon Edinson Mosquera no permitieron que los de Pelusso se marcharan tranquilos a los vestidores. 

El azul capitalino planteó un partido luchado y siempre buscando igualar el marcador, nunca renunció y prueba de ello fue lo que sucedió en la segunda parte. Millonarios prácticamente encerró al Cali en su campo y solo permitía las escapadas de los hombres rápidos de los caleños. Los bogotanos tuvieron su mejor opción con Ayron del Valle, quien en un cabezazo casi marca el empate, pero Lucumí salvo el arco. Luego el juvenil Salazar lo intentó con la media distancia, pero esta vez respondía Camilo Vargas

Sobre el final, el capitán verdiblanco Abel Aguilar se marcharía expulsado por doble amonestación y el cuadro vallecaucano se encerró con el objetivo de conservar el cero en el arco. Sin embargo, quedaba una última emoción. Una pelota que peleó con vehemencia Sand, sirvió para que el atacante se la cediera por la banda a Didier Delgado, quien llego por la banda derecha y lanzó la pelota al área para dejar mano a mano a Mosquera contra Fariñez, para que marcará la segunda anotación que sentenció el marcador. 

El verdiblanco sale satisfecho con el resultado, llenos de confianza, pero conscientes que se debe mejorar mucho para llegar a ser uno de los equipos que pelee de forma contundente por la primera estrella del año