La selección de Portugal está viviendo uno de los momentos más álgidos de su historia: además de que tiene a su mayor figura en buen momento, viene de conquistar el Viejo Continente después de vencer a Francia en la final de la Euro 2016.
Los dirigidos por Fernando Santos compartirán el grupo B de esta Copa del Mundo con España, Marruecos e Irán, siendo en vecino país la prueba de fuego en esta ronda pues, aunque viene de una pésima presentación en Brasil 2014, la Furia sabe jugar este tipo de competiciones, más aún después de haberse coronado en Sudáfrica 2010.
El siete es el número de la suerte
Portugal jugará en Rusia el séptimo Mundial de su historia, quinto de forma consecutiva, en el cual espera lograr una participación tan destacada como la de Inglaterra 1966, cuando fue tercera.
Inglaterra 1966 de la mano de la 'Pantera Negra'
En esa ocasión, clasificó como primera del grupo 3 con puntaje perfecto, tras derrotar 3-1 a Hungría en el mítico Old Trafford, 3-0 a Bulgaría en el mismo estadio y 3-1 a Brasil en cancha del Everton.
De esta manera, avanzó a los cuartos de final, en los cuales derrotó de forma épica a Corea del Norte, después de ir perdiendo 0-3 a los 25 minutos. Eusébio fue el héroe de la tarde con sus cuatro tantos para darle vuelta a un marcador que sentenció José Augusto a diez del final.
Sin embargo, nada pudo frenar a la Inglaterra de Bobby Charlton, que se quedó con la victoria 2-1 en semifinales y posteriormente con el título ante la Alemania Federal. Portugal debió conformarse con el tercer puesto, venciendo en dicho compromiso a la Unión Soviética.
Los fracasos de México 1986 y Corea-Japón 2002
Pasaron 20 años para que los Lusos volvieran a disputar una cita orbital, ahora en el continente norteamericano, lejos de casa y más aún de la histórica presentación del 66.
En este torneo, clasificaban los dos primeros de cada grupo y los cuatro mejores terceros, razón por la cual en el grupo F, donde estaba Portugal, clasificaron todos, menos ellos, a pesar de que ganaron el primer compromiso contra Inglaterra, pues luego llegaron las derrotas ante Polonia y Marruecos.
La experiencia negativa se repitió en el primer Mundial del siglo XXI, jugado en tierras orientales, en medio de una cultura desconocida que solo comprendió una persona en todo el mes: Ronaldo.
En esta oportunidad, tuvieron solo nueve días de competición, pues la ilusión que arrancó el 5 de junio se opacó en la derrota contra Estados Unidos, revivió tras golear 4-0 a Polonia, y se apagó totalmente el 14 de junio, al caer contra la anfitriona Corea del Sur por 3-1.
Los años de gloria volvieron en Alemania 2006
Al igual que cuatro años atrás, la suerte deparó el grupo D para Portugal, pero ahora con un resultado totalmente distinto. Los ibéricos demostraron lo bien que les sienta jugar en su continente y vencieron en los tres primeros duelos a Angola, Irán -Cristiano Ronaldo marcó su primer gol en Mundiales-, y a México, clasificando como cabezas de grupo.
El 25 de junio, vencieron en octavos de final a Holanda por la mínima diferencia, en un compromiso que pasó a la posteridad por ser el duelo mundialista con más amonestaciones y expulsiones en la historia: 16 tarjetas amarillas y cuatro rojas en total.
Luego de eso, llegaron los cuartos ante Inglaterra, ahora en un duelo menos accidentado pero más sufrido. Tras el 0-0 en los 120 minutos, los penales fueron los jueces de la venganza de 1966 y los testigos de una nueva clasificación de Portugal a semifinales.
Sin embargo, el anhelo del título se esfumó contra Francia, con un tanto de Zidane a los 33 minutos que bajó de carrera a los portugueses y los obligó a jugar el compromiso por el tercer lugar ante Alemania, que ganó por cuenta de Schweinsteiger y Petit.
Sudáfrica 2010 y Brasil 2014, los riesgos de salir de Europa
Portugal clasificó segunda en el grupo G de la Copa Mundial Sudáfrica 2010, sin la misma chispa que tuvo en la primera ronda del torneo anterior, con dos empates sin goles ante Costa de Marfil y Brasil, y una victoria por 7-0 contra Corea del Norte.
Los goles ante Corea fueron los únicos que marcó en toda la competición, porque en octavos de final España ganó por la mínima diferencia con un tanto de David Villa, dejando en el camino a su primer escaño camino al título.
La historia fue aún más decepcionante cuatro años más tarde en Brasil, cuando cayeron goleados 4-0 por Alemania y empataron a dos contra Estados Unidos, para hacer inútil la victoria en la fecha 3 contra Ghana, pues de todos modos se quedaron en el camino.
El goleador está enchufado
El jugador con más partidos en la historia de la selección es, además, su máximo goleador. Cristiano Ronaldo ya lleva 81 tantos con la camiseta de Portugal en 149 partidos, además de las estadísticas favorables en el Real Madrid, su club actual.
CR7 ha anotado 15 goles en la actual edición de la Champions League, los cuales lo convierten en el guía de su combinado hacia las semifinales. De igual forma, está a cinco tantos de Lionel Messi en la tabla de máximos anotadores de la Liga de España, que está perdida desde lo colectivo, pero puede aumentar su registro personal.
En contraste, el portugués solo registra dos dianas en Copas del Mundo, pero el preámbulo con el que llegará a Rusia le dará la motivación para, quizá, cambiar la historia.
Portugal se estrenará en este campeonato el 15 de junio en Sochi contra España, cinco días más tarde se verá las caras con Marruecos y cerrará el grupo B el 25 de junio vs Irán.