En el Estadio de Nizhni Nóvgorod, el equipo que dirige el ex-futbolista Janne Andersson desde 2016, planteaba su habitual 4-4-2 que le dio el pase al repechaje y a esta Copa del Mundo, eliminado a Italia; pero esta vez, lo haría con la ausencia de Lindelof, baja de última hora.
En la alineación de los surcoreanos, la novedad era en la portería. El entrenador Shin Taeyong colocó a el tercer portero Jo Hyeonwoo como titular y salió con un planteamiento 4-3-3 muy ofensivo, incluso más de lo habitual.
Además el entrenador Shin había preparado una estrategia para confundir a sus rivales, cambiando deliberadamente el número en las camisetas de sus jugadores en los encuentros amistosos previos.
Ambos equipos lucían muy concentrados cantando sus himnos, los suecos un poco más tranquilos, que además eran mayoría en las tribunas.
Los primeros minutos no hubo verdaderas ocasionas, pero sin duda, los Diablos Rojos llevaban la iniciativa del encuentro. Había poco juego y mucho corte de balón, el jugador Fosberg le pedía a sus compañeros más concentración.
Pasaron los primeros 15 minutos y Suecia se lanzaba más al ataque, un taconazo de Berg y una pared con Granqvist avisaban a la defensa asiática. Minutos después, ocasión clarisima para el mismo Berg que respondió mucho mejor el portero sorpresa en la titular.
El partido seguía trabado y con los Blågult (azules y amarillos) mucho más ofensivos. En 30 minutos ya el central había marcado 19 faltas y un jugador coreano Park salía lesionado, en su lugar entró Kim on el dorsal 12. Así acababa el primer tiempo sin mucho de que hablar, con un Corea del Sur que se fue diluyendo y terminó jugando al contragolpe y por el otro lado, con las opciones más claras para Berg.
En la segunda mitad se abrió más el partido, los Tigres de Oriente tendrían su oportunidad más clara con un centro desde la banda izquierda por parte de Son y Koo, que viene desde atrás, impacta de cabeza y el lanzamiento se estrelló en la red lateral.
El partido se volvía de ida y vuelta, con los coreanos contraatacando y nuevas salvadas de el portero Jo.
En una de las jugadas ofensivas de Suecia, hay una jugada polémica en la que es derribado Claeson, con un planchón claro de Kim Minwoo, y el VAR entra en acción, pitando el séptimo penal del mundial.
El encargado de cobrarlo es el capitán Granqvist, que con mucha templanza lanzó el tiro raso a la izquierda del meta Jo y marcaba la primera y única diana del partido.
El gol de penalti hacía justicia a lo visto sobre el césped. Los suecos lo habían buscado más y habían protagonizado las ocasiones más peligrosas.
Desde el gol, Suecia manejo y controló el partido y los rivales cada vez más desesperados. Corea del Sur apenas inquietó a Olsen. De hecho, la ocasión más peligrosa de los coreanos llegó al final, pero Hwang cabeceó mal y no pudo lograr la igualada.
Suecia se impuso 1-0 a Corea del Sur, gracias a un solitario tanto, depenalti de Granqvist. El combinado sueco que protagonizó las ocasiones más peligrosas se llevó los tres puntos que le permiten, junto con México, ponerse a la cabeza del Grupo F.
El próximo partido de los nórdicos será el sábado ante Alemania, que no puede permitirse ningún tropiezo más.