Nacido en Bosconia, César, el 2 de diciembre de 1996, Brayan Andrés Rovira Ferreira, luego estrenarse en el fútbol profesional colombiano con Atlético Nacional, fue prestado por la institución ‘verdolaga’ a otros clubes, Atlético Bucaramanga y Evngiado, donde maduró futbolísticamente y como persona.

Los jugadores tienen dos maneras de dar rédito deportivo en los equipos. Primero: jugando y ascendiendo por todas las categorías inferiores, hasta llegar al primer equipo, donde finalmente se consolidan o son prestados a otros clubes, para luego regresar y triunfar. Segundo: hacen la carrera juvenil en las categorías inferiores, luego, debutan y se consolidan en el primer equipo.

Brayan Andrés, jugador que en la actualidad está en Atlético Nacional, es uno de los principales protagonistas de este nuevo proceso deportivo ‘verdolaga’, pues su nivel, aunque no juega en la misma posición que hizo en Atlético Bucaramanga, ha sido bueno, siempre haciendo la más fácil, recuperando balones y entregándolos sin comprometer a un compañero.

Y es que desde que jugó su primer partido esta temporada -en el Torneo Fox Sports, en la posición de Jorman Campuzano, jugador que fue vendido a Boca Juniors- Rovira Ferreira ha mostrado características que le aportan mucho a la salida del equipo, basta con revisar los cambios de frente, manteniendo las proporciones, muy al estilo de Alexis Henríquez.

Además de lo anterior, el jugador que pasó por Envigado, también tiene un socio ideal, Sebastián Gómez, quien es el encargado de conectar la zona de volantes ofensiva con la de recuperación, labor que hasta el momento ha sido impecable, pues no sólo le ayuda a recuperar los balones, sino que también los distribuye de manera impecable.

Ahí va Brayan Andrés, de a poco, sin afán, aprendiendo de los más experimentados, sin revolucionarse en las recuperaciones, hablando, liderando y al mismo tiempo, madurando para lo que quiere el cuerpo técnico actual.