Los diablos rojos no han tenido la mejor campaña en estos cuadrangulares, se encuentran en la tercera posición del grupo aún así sin ganar ningún partido ya que el Unión Magdalena, equipo con el que se va a enfrentar en esta fecha se encuentra en una situación más complicada por los goles que le han marcado, sobretodo en la primer fecha ante Pasto.
Desde que el ‘Pecoso’ Castro dejó la dirección técnica del América de Cali, el equipo volvió a perder ese poco de estabilidad que le inyectaba el ‘pecoso’ y que le permitía a Aristiguieta brillar y marcar los goles que ayudaron a sumar para que el equipo ya estuviera casi clasificado en los cuadrangulares, ahora los dirigidos por Jerson Gonzales han mostrado poca asociación futbolística y las individualidades poco brillan cuando más los necesitan.
El América de Cali está obligado a ganar si quiere tener al menos una posibilidad de disputar ese primer puesto y llegar a la final, aunque el Pasto y Millonarios ya llevan un gran ventaja; los número han les dan la esperanza de conseguir la victoria y sumar para poder escalar posiciones, en este cuadrangular el América ha perdido los dos primeros partidos antes Millonarios y Pasto. Aparte de una victoria obligatoria que los deja un poco más tranquilos para las siguientes fechas, los diablos rojos también deben esperar otros resultados; deben ganarle al Unión en el Pascual Guerrero, ganarle al Deportivo Pasto como local e ir a Bogotá a sacarle también una victoria a Millonarios, aparte de eso necesita que los duros del grupo que son Pasto y Millonarios no sumen los 12 puntos de lo que queda de los cuadrangulares, ya que no tendrían posibilidad alguna de soñar con la final.
El equipo vallecaucano tiene un panorama bastante difícil para poder clasificar a la final, pero conservan la ilusión de lograrlo y quieren empezar este sábado frente al Unión Magdalena, como visitante, los dos no van a querer ceder más puntos y pondrán sus mejores armas para conseguir la victoria que tanto a América como al Unión Magdalena les abre el camino para alcanzar el primer puesto, no sin antes enfrentando a los duros rivales del cuadrangular.