En un transcurso aproximado de 48 horas el mundo del fútbol y la historia de Independiente Santa Fe se visten de luto por la partida de dos profesionales que ocuparon el banquillo de Director Técnico con lujo de detalles, y es que para hablar y recordar al Doctor Gabriel Ochoa Uribe y al yugoslavo Vladimir Popovic hay que hacerlo con el respeto y la admiración que dos campeones del fútbol y de la vida se merecen.

Para empezar con el Doctor Ochoa hay que recordarlo como un adelantado y estudioso del fútbol, un hombre exigente y dedicado 100% al juego del balón. No en vano fue el primer entrenador colombiano en utilizar el video para analizar los rivales y para conocer las posibles estrategias de sus contendores. Porque era un hombre que no le gustaba dejar nada al azar y trataba de dejar esa misma enseñanza en sus dirigidos.

El del 66 cuarto título al estilo Ochoa

Tras un lustro sin alzar el título y con más sin sabores que alegrías, los directivos cardenales deciden dar un cambio a la administración y traer al técnico de origen antioqueño. Aunque al principio su llegada no fue muy bien vista por su pasado con el rival de patio, el Doctor Ochoa saco adelante la maquinaria del expreso y la llevo a la estación del triunfo y las condecoraciones.               

Si bien el equipo bogotano y a pesar de contar con varios jugadores brasileños como Waltinho,  Ary Goncalves, y  Waldinho Ferreyra, no mostro un "jogo bonito" si fue contundente con sus rivales, y juntando el poderío brasilero a Manolin Pacheco, Carlos 'copetín' Aponte, Omar Lorenzo Devanni, y el 'maestrito' Alfonso Cañón todos jugadores de excelente técnica, más el elaborado trabajo táctico del D.T. Ochoa lograron hacer un Santa Fe sólido y efectivo, en su propio feudo y en tierras visitantes.

Y es que desde la primera vuelta ya empezaba a mostrar de que estaba hecho el equipo capitalino ya que en esta ronda tuvo nueve victorias, un empate y tres derrotas que lo ubicaban al tope de la clasificación. Y aunque en la segunda vuelta por momentos se tuvo altibajos deportivos la sabiduría del médico Gabriel Ochoa supo sobrellevar estos percances para que en la tercera y cuarta ronda se solidificaran los cimientos del título.

El Santa Fe de Ochoa Uribe era diferente: no jugaba tan bonito, pero lo hacía bien, en un torneo largo de cuatro vueltas perdió 11 juegos, el 20% de todo el campeonato y aunque su fútbol a veces era criticado por la tribuna consiguió un excelente trabajo táctico que lo hizo fuerte en defensa, y al mismo tiempo demoledor adelante. Marcó la no insignificante cifra de 102 goles para bordar la cuarta estrella en su escudo.

Santa Fe PJ 52- PG 25- PE 16- PP 11- GF 102- GC 76- PTS 66.

1971: 5 título de la mano yugoslava

El título de 1971 cumple con una premisa del fútbol que reza que el idioma universal es el balón y que esta por encima de todo tipo de lenguaje. Fue así como en el 69 llegó el yugoslavo Todor Toza Veselinovic, quien dirigió el conjunto cardenal con relativo acierto, pero dejó las huestes albirrojas para darle paso a su compatriota Vladimir Popovic. 

A principios de septiembre del 71, Popovic  así como su antecesor eran provenientes del Estrella Roja de Belgrado, uno de los clubes más poderosos en todo el orbe, además de llevar consigo el orgullo de haber estado presente en el mundial de Chile 62 con la potente Selección Yugoslava,  como buen yugoslavo Popovic anteponía la fuerza física, el buen estado atlético y la velocidad en su planteamiento algo que Santa Fe ya trabajaba con antelación.

Además para el yugoslavo era prioridad sacar ventaja a la altura capitalina para poder asfixiar a sus rivales desde los primeros minutos y hacerles sentir la presión capitalina. Aunque a la llegada de Popovic el equipo decayó en su parte futbolística, fue cuestión de tiempo para que el adiestrador acoplara las piezas y en las últimas fechas repuntara como un caballo de pura sangre consiguiendo siete triunfos y dos empates que le permitían asegurase su clasificación a los cuadrangulares finales, en compañía de Millonarios, Nacional y Cali buscarían la lucha del campeonato.

Tras un cuadrangular electrizante terminaron en la ultima fecha Santa Fe y Nacional con siete puntos y a la espera de una serie extra para definir el campeón. Después de las celebraciones navideñas llegaron los juegos definitivos el 30 de enero del 71 en Medellín con un excelente trabajo táctico. Santa Fe de la mano de Popovic  se llevo un empate a Bogotá, y el 3 de febrero a pesar de ser superior no pudo romper la defensa del verde obligando a un tercer partido en Cali. Y fue así como el 10 de febrero el equipo dirigido por Popovic, ese yugoslavo que le costo un poco encontrar el punto exacto del equipo pero que al conseguirlo hizo del expreso una  máquina de goles  que venció al conjunto verde 3-2 y se corono con su quinta estrella.

Paz en la tumba a estos dos estrategas, sus triunfos y títulos hacen parte de la historia  de Independiente Santa Fe.