Millonarios no se encuentra con su mejor versión en este momento, el embajador ha perdido tres de sus últimos cuatro partidos, y es uno de los equipos que más recibe goles, este jueves cuatro de marzo tiene la oportunidad de salir de su mala racha jugando contra el Boyacá Chico en Tunja.

En esta ocasión viajamos en el tiempo hasta el miércoles 18 de octubre del 2011, día en que ajedrezadosalbiazules se enfrentaron disputando primera final de la Copa Colombia.

Dicho partido se dio en un marco formidable, los hinchas del equipo capitalino viajaron en masa a Tunja y llenaron las graderías del estadio la Independencia, era un ambiente perfecto para Millonarios, que parecía local y iba a jugar como tal.

Los dirigidos por Richard Páez en ese momento venían de eliminar al Junior, mientras los boyacenses habían dejado en el camino a Nacional, los azules salieron en busca de la ventaja para días después definir la serie en Bogotá.

El equipo albiazul fue quien tuvo la iniciativa y generó las mejores opciones de gol en todo el partido, pero entre la defensa ordenada del Chico y su arquero Cristian Bonilla contenían cada ataque, era una muralla difícil de derribar, así se fue el primer tiempo, con opciones y claridad en el juego por parte de Millonarios, pero sin la definición necesaria.

La segunda etapa se dio de la misma manera, los azules insistían pero los ajedrezados defendían de la mejor manera, hasta que al minuto 82 Rafael Robayo, capitán de los embajadores logró romper la defensa y marcar el primero y único gol del partido.

Uno por cero se impuso el equipo de Páez en condición de visitante, ventaja que le daría a Millonarios la tranquilidad de definir la serie en casa, donde volvió a ganar por el mismo marcador, coronándose campeón después de 23 años en un campeonato nacional.

Recordada victoria en Tunja, que fue la cuota inicial para que el equipo levantará la Copa Colombia por segunda vez en su historia y gritará campeón después de mucho tiempo.

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