La tarde en el oriente antioqueño llegaba con uno de los duelos más interesantes de la fecha liguera pues Rionegro, con la firme intención de mejorar su andar en el campeonato, recibía al Medellín, líder absoluto del torneo con cuatro victorias en igual cantidad de presentaciones.

Los primeros minutos no favorecían las emociones de una tribuna en su mayoría roja: los equipos se estaban acoplando a la cancha, así que no se hacían mucho daño. Hasta el minuto 10, cuando Camilo Ayala cazó un rebote y abrió el marcador a favor del conjunto local, para marcar dominio de partida, pese a que aún quedaba mucha tela por cortar.

A medida que pasaba el tiempo, se hacía más evidente que el DIM no estaba cómodo en el campo de juego, además, había perdido el balón y eso le daba más facilidades a Águilas, que estaba dominando el partido a placer.

Después del gol de Águilas, no hubo más emociones en el oriente antioqueño hasta que al minuto 48, ya en tiempo adicional, Didier Moreno tocó el balón con la mano y recibió su segunda tarjeta en menos de cinco minutos, por lo cual dejó a su equipo con 10 hombres y la necesidad de voltear el marcador.

La primera mitad acabó sin cambiar la tendencia por parte del Medellín, aunque Rionegro también había entrado en un letargo que mantuvo la monotonía en el compromiso y dejaba mucho por hablar en los camerinos del Alberto Grisales.

Ya para el segundo tiempo, el técnico Ismael Rescalvo decidió darle paso a Mauricio Gómez por Rodin Quiñones, con la intención de rearmar su mediocampo y camuflar al máximo la ausencia de Didier en la zona de marcación. 

Sin embargo, además de que durante los primeros minutos del complemento no se vio una mejora en el equipo de la capital antioqueña, Leonardo Castro vio la roja directa al minuto 64, por una dura entrada contra un jugador del cuadro local, que fue vista como agresión por parte del juez central.

Y los dolores de cabeza del DIM aumentaron al minuto 75, cuando Águilas cobró un tiro de esquina y Humberto Osorio definió ante la pasividad de la defensa visitante.

Ya 2-0 abajo, y con dos hombres menos, lo único que el Medellín pudo hacer fue sostener el resultado adverso y evitar que le hicieran más goles. Ahora, y con mucho por corregir, el equipo dirigido por el español Ismael Rescalvo deberá comenzar a pensar en Junior, club al que recibirá el próximo domingo en el Atanasio.