Millonarios logró el objetivo principal y disputará la estrella 15 esta semana contra Santa Fe, tras eliminar al América de Cali, y todo es gracias al trabajo de Miguel Ángel Russo, quien supo levantar a un equipo que arrancó con mal nivel y ahora lo tiene peleando el título.

No es para menos la campaña del argentino con los azules, pues completó 82 puntos en el año, con el cupo a CONMEBOL Libertadores y con la mayor cantidad de unidades en una temporada de dos torneos semestrales, que ponen a soñar a la afición.

Luego del encuentro con América en Bogotá, el técnico habló en rueda y se mostró muy “contento con el grupo y porque fue una semifinal muy difícil, contra un rival complicado. Ambos partidos fueron muy disputados, nos costó pero estamos en la final. Ahora hay que pensar en la final y prepararnos para tal”.

“Son partidos de mucha tensión y cuesta encontrar los espacios. En el segundo tiempo los encontramos y no pudimos definir. Tuvimos oportunidades que no pudimos definir, sufrimos demasiado, pero vamos por buen camino, debemos tener más tranquilidad y más calma”, afirmó el timonel argentino.

Russo ya venía perfilando el juego contra Santa Fe, el rival en la final, y lo que será disputar la definición en el 'Clásico Capitalino', además de aplazar por un día el juego de ida para descansar: “Pedimos jugar jueves y domingo, que creo que es lo más lógico. Y ya estamos pensando en Santa Fe. Son dos equipos que se conocen, creo que una final en Bogotá es muy importante y debemos disfrutarla".

"Este grupo está fuerte de la cabeza y arrancamos a trabajar la final. Uno no se guarda nada ya que queremos el título. Ahora hay que recuperarse, pero la cabeza puede más que todo”, fueron las palabras del entrenador, quien sigue a la espera de la posible suspensión a Ayron del Valle.

Finalmente, el argentino dijo que este clásico no será el mismo a los perdidos en el semestre: “Ningún partido es igual a otro. Ahora se vive de otra manera y seguimos mejorando cosas, entre ellas el juego aéreo”.

Millonarios arrancará la final como local, en un estadio que estará con la gran fiesta de conseguir la anhelada estrella, esa que ha sido tan esquiva desde el 16 de diciembre de 2012.