“Se lució, Cali se lució”, gritaron continuamente más de 35.000 espectadores asistentes al cierre de 11 días de competencias deportivas en el Estadio Olímpico Pascual Guerrero. Sin duda, una fiesta que se gozó por 2 horas en la sucursal del cielo, donde los ritmos netamente colombianos fueron anfitriones de la ceremonia.
Italia fue el gran ganador de este año; siendo el país que sumó el mayor número de medallas de oro, ganando 18 de ellas junto con 13 de plata y 18 de bronce. Le siguió Rusia, en segundo puesto, con 17 medallas de oro, 23 de plata y 13 de bronce. Y en tercer puesto, Francia, reuniendo 16 medallas de oro, 11 de plata y 13 de bronce.
La apertura
Un show laser que iluminó el estadio por 10 minutos con la frase "Gracias Cali" en trazos de colores fue lo primero que sorprendió a los aficionados. En seguida, se abrió paso al desfile de deportistas y voluntarios que formaron parte de todo el hecho. Más de 109 naciones de los 5 continentes hicieron presencia en esta novena versión de los juegos.
José Aguirre, el “Rey Midas” de la música en Cali, interpretó con su trompeta el himno nacional de la República de Colombia, el cual fue acompañado por el canto de todos los presentes. Se respiraba amarillo, azul y rojo.
Solo palabras de agradecimiento se escucharon del alcalde de la ciudad, Rodrigo Guerrero Velasco. “Qué bella noche esta, qué esplendor. ¡Qué viva Cali!”, manifestó en su discurso continuado de una serie de reconocimientos a operarios, conductores, pintores, recicladores, fuerzas armadas, empresas municipales, los mismos deportistas y al presidente de Colombia, Juan Manuel Santos. “Cali se lució y se seguirá luciendo siempre”, concluyó.
Cali en fiesta
60 jóvenes de la Orquesta Sinfónica Juvenil Salsera fueron los apoderados de transmitir color, movimiento y pasión por este baile. Un set con diversas canciones de la conocida melodía hicieron danzar con precisión las 30 parejas a toda velocidad, donde ‘Cali Pachanguero’ no podía estar por fuera del repertorio.
Herencia de Timbiquí, deleitó con la marimba, el cununo, la tambora y la guasá. Con sonidos de la Costa Pacífica colombiana contribuyeron con la euforia y goce de nacionales y extranjeros. Superlitio, banda de la casa, interpretó sus conocidos éxitos que fueron coreados a todo pulmón por sus más fieles seguidores.
'Pa’ Maité', 'La tierra del olvido', y 'Volví a nacer' fueron las letras que el samario Carlos Vives escogió para hacer retumbar el recinto. Nadie más representativo y autóctono que el cantante vallenato.
Entre aplausos, nostalgia y juegos pirotécnicos culminaron los Juegos Mundiales en Cali; ciudad invitante que entregó la bandera a Polonia, quien llevará a cabo la décima edición de la competición en el 2017.