Aunque ya había anunciado su retiro de la actividad profesional en mayo de 2018, Ichiro volvió del retiro para decirle adiós al béisbol donde todo comenzó y ante su público, el 21 de marzo, a los 45 años y con una carrera admirable, el jardinero japonés anunció su retiro oficialmente del béisbol, después de disputar en su país natal, una serie de dos juegos con la camiseta de los Marineros de Seattle frente a los Atléticos de Oakland, en los que su equipo se llevó la victoria en los dos juegos y así dar inicio a la temporada 2019 de grandes ligas.

Ichiro con una carrera de casi 3 décadas, desde su debut en la Liga del Pacifico de Japón con los Orix Blue Wave, donde jugó nueve años y conectó 1.278 hits, decidió asumir el reto de jugar en el mejor béisbol del mundo. En el 2001, a los 27 años firma con los Marineros de Seattle, y ese mismo año ganó el premio al novato del año y MVP al jugador más valioso de la campaña, premios que completó con su primer guante de oro y su primer bate de plata, sigue siendo el único pelotero en ganar los premios más importantes para un jugador de campo en su primera temporada.

Ichiro posee un gran número de records, entre los que se encuentran, ser el único jugador en la historia de grandes ligas con una temporada de 262 hits, tuvo 10 temporadas seguidas de 200 o más hits, siendo la racha más larga para cualquier jugador, dio 3.089 hits en MLB, lo que lo ubica en el puesto 21 de todos los tiempos , participó 10 veces en el juego de estrellas, siendo el jugador más valioso en la edición del 2007, donde conectó un cuadrangular dentro del parque y es el único jugador con ese registro. Ichiro ganó el guante de oro en cada una de sus primeras diez temporadas y en toda su carrera se robó 509 bases. Ichiro ostenta el record de imparables, sumando las ligas de Japón y Estados Unidos, donde acumula 4.367 hits y tendrá un promedio de bateo de 0.311 de por vida.

El jardinero japonés jugó 19 años al máximo nivel del béisbol, ahí vistió el uniforme de Marineros de Seattle, Yankees de Nueva York y Marlins de Miami, es sin duda una de las figuras más importantes del deporte y la máxima estrella del béisbol nacido en Japón. A partir de ahora, Ichiro deberá esperar cinco años para que su nombre aparezca en la boleta de candidatos al salón de la fama y convertirse con toda seguridad en un inmortal de Cooperstown.

En la serie que lo vio despedirse del béisbol, Ichiro no conectó hits en ninguno de los dos juegos, donde tuvo  5 turnos oficiales y solo llegó a la inicial en el primer juego con una base por bolas. En la parte alta del noveno Inning, Ichiro salió a defender el jardín izquierdo, y antes de que arrancara el inning, salió trotando del terreno con una completa ovación de sus más de 46.000 compatriotas en el Tokyo Dome para despedir a un jugador con una carrera inigualable dentro y fuera del terreno, donde nunca fue centro de escándalos, fue un modelo a seguir para sus colegas, futuras generaciones y toda la humanidad.