Se presentaba a la final dispuesto a romperlo todo. Con el mejor salto en calificación, no parecía descabellado pensar que podía alzarse con el oro. Un buen inicio, con un segundo salto de 8.25 –igualando la marca de la calificación- confirmaba los buenos augurios. El español se colocaba primero con Menkov cuarto, aún frío. No tardaría el ruso en ponerse las pilas, pues justo con el tercer salto volaba hacia los 8.52 metros, un registro que a ojos de todos ya parecía inalcanzable. Con los tres siguientes saltos, Cáceres perdería dos posiciones en favor del holandés Gaisah -8.29- y el mexicano Rivera -8.27-.

A falta de una sola ronda, un centímetro separaba a Cáceres del bronce. Un centímetro que no pudo superar pues solo pudo saltar 8.20. Gaisah y Rivera mantendrían la plata y el bronce, respectivamente, mientras que el oro se lo llevaría Menkov, que aún mejoraría su salto hasta los 8.56, mejor marca personal y mejor marca mundial del año. Por detrás quedaron el brasileño Da Silva -8.24- y el alemán Reif -8.22-. Pese a todo, una gran actuación del saltador alicantino, que no consiguió medalla pero cumplió y luchó en una final de gran nivel. Parece que el futuro de la longitud mundial pasa, entre algunos otros, por las manos de los jóvenes veinteañeros Cáceres y Menkov.

El otro español con protagonismo esta tarde era Bruno Hortelano, que disputaba las semifinales de los 200 metros tras su brillante papel en las series clasificatorias, donde logró récord de España de la distancia (20.47). Entrar en la final parecía, sin embargo, toda una quimera. Encuadrado junto a Mitchell, Weir o Vicaut, Hortelano corrió muy bien y terminó en una meritoria quinta plaza (20.55), sin grandes diferencias con los primeros. En la segunda semifinal le tocó a Usain Bolt, que como era de prever cumplió con el trámite y se clasificó para la final con una victoria, una décima por delante del sudafricano Jobodwana. En la tercera y última semifinal, el joven británico Adam Gemili (19.98) fue el vencedor tras luchar hasta el final el triunfo con el jamaicano Ashmeade. Martina fue tercero y el ucraniano Smelyk, cuarto. La final tendrá lugar mañana a las 18:05 de la tarde, hora española. 

Bolt ansía un doblete en 100 y 200 metros lisos que ya tiene su compatriota Fraser-Pryce, que esta tarde venció a sus rivales con solvencia tal y como hizo en el hectómetro. La jamaicana nunca vio peligrar un triunfo que fue un poco más fácil a causa de la lesión de Allyson Felix. En el paso por la curva, la estadounidense se frenó y se echó al suelo, ya sin posibilidad de luchar por continuar. Con este oro, la velocista del Caribe se rehace del resultado de Londres, donde se tuvo que conformar con la plata tras verse superada precisamente por Felix, y se convierte, a falta de dos días de competición, en una de las grandes figuras de este Mundial.

También será una de las estrellas el fondista Mo Farah, que otra vez cumplió con los pronósticos y no defraudó a las gradas del Estadio Luzhniki con su victoria en los 5000 metros. La prueba empezó rápida, con el líder del año, el keniano Koech, encabezando el grupo. Farah se resguardaba entre el grupo sin dar ningún tipo de señal a los rivales. Con intercambio de líderes, el ritmo disminuyó y fueron pasando las vueltas sin demasiados cambios, esperando las últimas vueltas. Fue entonces cuando el británico tomó las riendas de la prueba, no sin mantenerse la igualdad, hasta el punto que tras el toque de campana eran seis los hombres que luchaban por ponerse líderes. Tras un acelerón importante del etíope Gebrhiwet, Farah, Koech y Longosiwa apretarían los dientes en un sprint que acabaría llevándose el de siempre (13:26.99). La plata para Gebrhiwet (13:27.26) y el bronce para Koech (13:27.26). Con este ya son tres los dobletes -5000 y 10000 metros- que logra Mo Farah en competiciones internacionales, tras los logrados en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y en el Europeo de Barcelona 2010. 

Otra bonita batalla se pudo ver en la final de lanzamiento de martillo femenino, donde el oro se luchó hasta la extenuación. Tatyana Lysenko derrotó a Anita Wlodarczyk pero para hacerlo tuvo que realizar el mejor lanzamiento de la historia de los campeonatos, 78.80 metros. La polaca se quedó en 78.46, mejor marca personal y récord nacional. Lejos estuvieron las chinas Zhang y Wang, que se disputaron un bronce que acabó llevándose la primera con un mejor tiro de 75.58 (por 74.90 de Wang).

También la final de lanzamiento de peso tuvo sus más y sus menos. Ganó el alemán David Storl con un mejor lanzamiento de 21.73. Sin embargo, el tiro fue declarado nulo por los jueces en un primer instante por haber pisado. Storl reclamó al instante y los jueces, que revisaron el tiro desde la cámara de un fotógrafo, aceptaron la prueba y dieron por válida la marca. El máximo favorito, Ryan Whiting, se tuvo que conformar con la plata (21.57) y el canadiense Dylan Armstrong con el bronce (21.34). El campeón del mundo en Osaka, Reese Hoffa, se quedó a las puertas del podio y el actual campeón olímpico, el polaco Majewski, terminó séptimo.

Además, Estados Unidos venció en el relevo 4X400 con un estelar LaShawn Merritt, por delante de Jamaica y Russia. Gran Bretaña terminó cuarta y Bélgica, con los tres hermanos Borlée, quinta.  En el 800 femenino, el oro fue a parar a manos de la estadounidense Johnson Montano (1:58.92), por delante de su compatriota Martinez y de Lupu.

Resultados de la jornada de tarde