Líder de la Diamond League y reciente vencedor del campeonato de España celebrado en Gijón, Orlando Ortega es una de las bazas españolas más fiables en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, y es que el vallista cubano, pero nacionalizado español, tiene la tercera marca mundial del año, con un crono de 13,04, por detrás del jamaicano Omar McLeod (12,98) y el estadounidense Devon Allen (13,03). Más allá de lograr la medalla de oro en la cita olímpica, que es su principal objetivo, Ortega no esconde en ningún momento que bajar de los trece segundos es el siguiente escollo que debe superar, sobre todo teniendo en cuenta que ha estado cinco veces por debajo de los 13,20, en Doha, Rabat, Madrid, Gijón y Mónaco y en 13,22 en Roma. La regularidad como forma de vida para un atleta que necesitaba un gran resultado como el conseguido este fin de semana en Gijón para sentirse con la confianza necesaria que le haga competir sin ataduras en los Juegos Olímpicos.

"Todos querían ver esta carrera, he intentado hacerlo lo mejor posible y espero que hayan disfrutado"

Como no podría ser de otra manera, Ortega tenía claro que en su último escollo antes de los Juegos Olímpicos debía hacerlo bien para ganar en confianza antes de la cita olímpica. "He salido a correr, sabía que tenía que aprovechar esta oportunidad antes de los Juegos Olímpicos y me llevo una gran alegría como esta, estoy tranquilo y muy fuerte para la Olimpiada, pero necesitaba hacerlo bien aquí para sentir la satisfacción de como estoy y salió, estoy contento y ahora esperando los Juegos. Tenía mucha ilusión de competir aquí, sabía que podía hacerlo bien, he tenido una expectación espectacular durante toda la semana, todos querían ver esta carrera, he intentado hacerlo lo mejor posible y espero que hayan disfrutado", comentó ante los medios de comunicación.

Para terminar, Orlando Ortega se siente como en casa en España, teniendo claro que por delante deberá seguir entrenando a fondo para llegar a Río de Janeiro de la mejor forma posible. "Son ya tres años en España, me siento como en casa, se que son dos mundos totalmente distintos pero estoy muy contento, he tenido una excelente familia aquí como mi club y la gente que me ha apoyado día a día, espero que sigan habiendo resultados así. Ahora toca seguir entrenando fuerte y esperar a ver que pasa en Río", concluyó.