Tras un 93-66, o lo que es lo mismo, tras perder de 27 puntos, en un partido en el que todos los jugadores locales anotaron al menos una canasta y cogieron al menos un rebote, poca esperanza te puede quedar de pasar la eliminatoria. Incluso siendo a 5 partidos. A priori era la eliminatoria más descompensada junto con la del Real Madrid - Anadolu Efes, y así se confirmó en la primera toma de contacto en la eliminatoria. Tras haber entrado con la ventaja que le dió el basket average, los griegos del Panathinaikos se fueron con una desventaja de 28 puntos ante un CSKA inspiradísimo, que puso en valor su condición de favorito y de factor cancha para llevarse facilmente el primer partido.

Es esta tesitura se encuentran los de Panathinaikos, que tras haber sido apaleados por el equipo ruso, se enfrentan al segundo partido con un margen de 48 horas, que en caso de perderlo dejaría la eliminatoria practicamente sentenciada a favor de los de Itoudis.

Sin mayores novedades en cuanto al parte médico en ninguno de los dos equipos, y con los minutos del anterior partido muy repartidos entre los 24 jugadores (salvo en el caso de Papagiannis, que no disputó ni uno en el primer partido de la eliminatoria).

Teodosic y Diamantidis, las claves

Con 18 puntos y 8 asistencias en menos de 20 minutos jugados, el serbio Milos Teodosic volvió a ser la clave para los de Itoudis. 10 de esos puntos fueron en el primer cuarto, lo que ayudó a su equipo a empezar a tomar la renta que consiguió a la media parte, siendo el jugador más importante para los rusos. Por ello, él sea probablemente otra vez la clave para su equipo, y en caso de que los bases de Dusko Ivanovic no sean capaces de parar al serbio, será muy complicado que sean capaces de pelear el partido.

Por otro lado, la segunda clave para que los griegos puedan tener posibilidades de ganar este partido e igualar la eliminatoria pasa por Dimitris Diamantidis. El griego, no consiguió anotar en el partido del martes, en practicamente el mismo tiempo que Milos Teodosic en pista, siendo uno de los peor valorados de su equipo. Con un buen partido suyo y con Gist y Pappas en el mismo nivel que mostraron en el partido anterior, y en extensión durante toda la temporada, pelearán por una eliminatoria que desde el principio se ha supuesto muy decantada hacia Rusia.

Los dos entrenadores, cautelosos

Los dos entrenadores se mostraron cautelosos tras el abultado resultado en el primer partido, y ahondaron en que este segundo seguro que no tendría nada que ver con el acontecido el martes. Itoudis no dudó en decir que "Panathinaikos tiene un gran elenco de jugadores buenos y experimentados, y seguro que lo demuestran en el segundo partido".

Por su parte, Dusko Ivanovic ha destacado que tienen que cambiar su mentalidad frente al partido en los dos días que hay entre uno y otro, ya que según el montenegrino están a tiempo de competir la eliminatoria.

Los jugadores de ambos equipos siguieron también la línea de sus entrenadores. Los del CSKA no echaron las campanas al vuelo mientras que los del Panathinaikos se mostraron confiados de poder dar un golpe de efecto a la eliminatoria en este segundo partido.

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