Jonas Maciulis (Kaunas, 1985) ha sido una de esas piezas necesarias para que todo el engranaje blanco funcionara. Y eso estaba en la mente de Laso para que el proyecto 4.0 carburara a la perfección. Un hombre con experiencia contrastada en equipos europeos de élite, pero que también ha pasado por malos momentos deportivos y ha vuelto a conquistar la cima deportiva en esta magnífica temporada.

El comienzo

Maciulis hizo su debut profesional en 2004, en la LKL con el equipo Nevėžis. Promedió 13.6 puntos y 5.8 rebotes por partido en su única temporada en el equipo. Mačiulis firmó con el Žalgiris de Kaunas, su ciudad natal, en 2005. Con el Žalgiris ganó el título de la VTB United League en 2008, dos LKL en 2007 y 2008, y dos LKF taurė en 2007 y 2008. Mačiulis dio un salto en la producción en cada uno de los primeros años de su carrera. Tuvo una gran temporada en 2006-07, promediando 12,7 puntos y 5,0 rebotes por partido en la Euroliga. Mačiulis promedió un récord personal de 14.0 puntos y 5.0 rebotes por partido en la temporada 2008-09 en la Euroliga.

Por todo ello demostró que era un hombre clave en el Zalgiris, pero los lituanos estaban muy faltos de presupuesto, así que tuvo que salir a otros equipos de Europa en busca de un mejor contrato. El 1 de julio de 2009, Mačiulis firmó con el equipo de la Liga italiana Olimpia Milano. Marchaba allí como un hombre franquicia, decisivo y muy trabajador. Pero debido a una terrible lesión en la rodilla se fue al dique seco y estuvo sin jugar al baloncesto durante 9 meses. Olimpia Milano no le ofreció al jugador un nuevo contrato, a pesar de su buen desempeño antes de sufrir la lesión. Tuvo que fichar por el modesto Baltai lituano, casi sin cobrar nada y buscando una nueva oportunidad para empezar desde cero.

Y gracias a su esfuerzo y calidad, el 24 de julio de 2012, firmó un contrato de un año con el equipo Panathinaikos de la Liga griega, un equipo poderoso donde volvió a sentirse el gran jugador que es. Allí estuvo dos temporadas donde su rol fue creciendo día a día, recuperando sensaciones tanto en ataque como en defensa. Eso no pasó desapercibido para un Pablo Laso al que gustaba desde hace tiempo. El guerrero báltico volvía a estar en lo más alto del escaparate europeo.

Completando el Madrid perfecto

El 26 de julio de 2014 se oficializa su fichaje por el Real Madrid. Venía como un hombre de equipo, con gran trayectoria en la selección lituana de la que es un titular asiduo en la última década. Pero acoplarse a este Madrid de grandes estrellas no era fácil. Y Maciulis lo hizo a la perfección. El primero en dejarse la piel en cada uno de los entrenamientos. Lo suficientemente veterano como para dar grandes consejos a los más jóvenes que están rompiendo ahora. Y ante todo, lógico y pulcro para saber que tiene que salir desde el banquillo y hacer su gran trabajo sin que ello suponga un deshonor.

El lituano ha aparecido en los momentos claves de la temporada. Ha defendido como un chicle y entendido a la perfección las nociones tácticas del equipo, acoplándose a la zona 3-2 y las defensas hombre a hombre. Además ha sacado su letal muñeca en momentos puntuales como la Final Four, donde anotó hasta nueve puntos consecutivos ante un Olympiacos al que casi dio la puntilla.

El excelso escolta lituano es un hombre de equipo, que ha sufrido mucho por el camino y se ha reinventado a sí mismo para dar ese trabajo de intendencia 24 horas que Laso le ha exigido desde el primer día. Un trabajador incansable del baloncesto, que en el Madrid ha conseguido el culmen de su amplia carrera deportiva.

Fotos del texto: old.kozaska. si // Eurosport.es // Euroleague.net

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Sobre el autor
Carlos de la Rosa Llano
Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y en Derecho por la UNED. Redactor jefe del Real Madrid de baloncesto en VAVEL, corrector y editor de la revista literaria El Mar de Tinta, experiencia previa en grandes empresas como Cadena SER y RNE. Doctorando especializado en Redacción periodística, Abogado, Master en Derecho Privado, miembro del ICAM y la Asociación de la Prensa de Madrid desde hace 10 años.