Entregar la tarea a tiempo permite, a los buenos estudiantes, llegar a períodos vacacionales con esa tranquilidad y relajo que muchos de ellos piden cuando se encuentran en pleno mes de exámenes. En el deporte ocurre algo parecido, y es que la fase de grupos de la Euroleague empieza a llegar a su fin, tan sólo restan dos jornadas para conocer a los equipos que formarán parte del Top 16. Y las plantillas que ya han resuelto sus tests, como el FC Barcelona Lassa y el Zalgiris Kaunas, pueden respirar aliviadas, han superado el primer trimestre con buena nota.

Pero no por ello el trabajo ha finalizado, ya. Los alumnos ambiciosos siempre quieren más, intentan mejorar día a día, y van a buscar la mejor nota que puedan obtener. Y si hay alguna asignatura en la que han flojeado, intentarán mejorarla. En el caso del FC Barcelona Lassa, esta asignatura pendiente es la de su papel como visitante.

Las dos derrotas de los azulgrana en la fase de grupos llegaban lejos del Palau Blaugrana, contra Pinar Karsiyaka, en la jornada inaugural de la competición europea, y en Atenas, contra un Panathinaikos que fue creciendo poco a poco. Los de Xavi Pascual acusaron, quizás en exceso en el partido en tierras helenas, la falta de rodaje del grupo. Frente a ellos, un Panathinaikos unido, que se conoce a la perfección y con un Dimitris Diamantidis capitaneando al grupo, lograba la segunda derrota del FC Barcelona Lassa. 

Sorpresa inicial

Los fantasmas del primer encuentro de la fase de grupos parecían olvidados. En Turquía, el Pinar Karsiyaka había dado la sorpresa venciendo a uno de los favoritos a estar presentes en la Final Four 2015-2016. Poco a poco, los catalanes habían encontrado su sitio en el continente, pero el Panathinaikos se interpuso en su camino y les obligó a corregir errores. La falta de acierto en el lanzamiento exterior fue, probablemente, el lastre que condenó a los de de Pascual (42,9% en tiros de dos puntos y 35,7% en tiros de tres).

En el partido de ida, fue la diferencia de anotación entre uno y otro equipo la que acabó por romper el partido. Pese a ganar el primer parcial, el Zalgiris sólo consiguió 16 puntos en el segundo período, por 23 del Barça. Un 18-22 en el tercero y un 21-18 en el último cuarto fueron suficientes para que los azulgrana sumaran un triunfo en Kaunas. 

Amenazas lituanas

El Zalgiris, un conjunto que combina experiencia y calidad a raudales, tiene su pase al Top 16 en el bolsillo. Y a modo de resumen, uno de los peligros con los que cuenta es con Ian Vougioukas en la pista: 12 puntos y cuatro rebotes le avalan, y le convierten en el máximo anotador de los verdes.

La diferencia entre una y otra plantilla radica en los puntos que anotan cada una. Mientras los lituanos suman una media de 66 puntos, el FC Barcelona Lassa consigue 82 cada semana, una anotación que les deja como uno de los mejores ataques de la competición.

La novena y penúltima jornada llega, pues, para un Barça que observa a sus rivales desde la primera posición, desde un trono que ya le ha llevado a formar parte del Top 16. El penúltimo rival antes de esta fase es un Zalgiris que también ha entrado en el selecto grupo de 16 y que buscará asaltar un Palau en el que, de momento, no ha ganado nadie.