Tras perderse los dos partidos previos por una contusión en la pierna izquierda sufrida el pasado lunes en el encuentro ante Sacramento Kings, Curry se resintió de la lesión en la espinilla a falta de dos minutos para que culminara el segundo cuarto y partió hacía el vestuario para no regresar más al juego.

Según él, la lesión ocurrió cuando el base de los Nuggets, Jameer Nelson, chocó contra su pierna a mediados del segundo cuarto. Curry confirmó que se había resentido de la lesión y dijo que fue golpeado “justo en el mismo lugar, mientras defendía”. “Es curioso, cuando te duele algo y tratas de salir a jugar igual, te pasa algo. Tendré que lidiar con ello” expresó.

La lesión de Curry dejó a los Warriors con solo seis jugadores disponibles debido a que se suma a otras lesiones que están dejando al equipo con poco recambio.

A pesar de su situación personal, Steph elogió la victoria de su equipo y declaró: “Con un panorama desfavorable, muchos jugando más de 40 minutos, encontraron la manera de salir adelante con garra e incluso hicieron un par de jugadas interesantes en ataque también. Una victoria que demostró valentía”.

Acerca de cómo se sintió durante el juego, Curry dijo: “Me estaba sintiendo muy bien, solo percibía algo de incomodidad en las piernas pero me permitía desenvolverme bien igualmente. Solamente apesta el lugar donde fui golpeado hoy. Veremos cómo me siento el lunes”.

Además de dar su pronóstico, agregó: “Yo sé exactamente lo que pasa. Es solo una cuestión de cómo me sienta mañana y así todo el tiempo. No es tan malo como la primera vez que sucedió, así que eso es una buena noticia”. El lunes, los Golden State Warriors tendrán que recibir en su casa a los Charlotte Hornets y la participación de Stephen Curry todavía es una incógnita.