El Real Madrid afrontará este viernes el partido más asequible del Top 16, por jugarse en casa y sobre todo por el rival, en principo el más fácil y que además llega en un momento complicado.

Los blancos cuentan con un balance de 1-1 en su casillero y los lituanos con un 0-2 que ha precipitado la destitución de Gintaras Kaprikas. Su sucesor, Sarunas Jasikevicius, tratará de recuperar la moral del equipo para dar la sorpresa y asaltar el Barclaycard Center.

Victoria obligada

En el grupo de la muerte del Top 16 los partidos en casa son doblemente importantes. Lograr victorias a domicilio se convierte en una tarea tan sumamente complicada que asegurar los duelos en casa resulta un factor clave para tener éxito y conseguir la clasificación para los cuartos de final. Y por eso el viernes el Madrid no puede fallar. Jugar en el Palacio frente al rival más asequible del grupo hace que la victoria sea obligatoria.

En cualquier caso los blancos no pueden confiarse. Todos los rivales son peligrosos en el Top 16 y el Zalgiris jugará motivado tras la llegada de Jasikevicius al banquillo. La defensa se antoja fundamental para llevarse el triunfo final y el average en un partido como este puede ser también un aspecto a tener muy en cuenta, ya que parece un choque idóneo para conseguir una amplia ventaja que puede venirle muy bien a los blancos al final de esta fase en caso de empate.

El factor Saras

El Zalgiris llega a Madrid en un momento complicado. El ambiente en las últimas semanas ha estado muy agitado y enrarecido por los malos resultados del equipo y todo ha terminado con la destitución de Kaprikas y el nombramiento del legendario Jasikevicius en su lugar. El exjugador de Maccabi, Barcelona, Panathinaikos y por supuesto Zalgiris, entre otros, afrontará su primera experiencia como entrenador.

Sarunas Jasikevicius | Foto: blogdelbasket.com
Sarunas Jasikevicius | Foto: blogdelbasket.com

La llegada del mítico Saras puede venirle bien al conjunto lituano, sobre todo en cuanto a moral, confianza e ilusión, aspectos que parecían haber perdido los jugadores tras caer frente al Laboral Kutxa y el Brose Baskets de forma casi humillante. Después de cuajar una correcta primera fase (5-5) en la que se cumplió el objetivo de pasar de ronda, el Zalgiris se ha desplomado en el Top 16 y debe reaccionar rápido si quiere clasificarse a los cuartos de final, ya que es el único equipo del grupo F que aún no conoce la victoria.

Aunque resulta complicado destacar algo en el actual Zalgiris, los de Kaunas cuentan con jugadores de buen nivel que deben dar un paso al frente en esta difícil situación. Los veteranos Kalnietis, Jankunas, Seibutis y el exmadridista Pocius son las caras más reconocibles en una plantilla en la que también destacan el experimentado pívot griego Vougioukas y el joven anotador canadiense Olivier Hanlan. Los dos fueron los fichajes estrella del verano y serán dos de las principales bazas del equipo báltico. Otros jóvenes como Lekavicius, Ulanovas o Vecvagars completan un roster lituano mermado por las bajas de Javtokas y Lipkevicius.

Precedentes del choque

El Real Madrid y el Zalgiris Kaunas se han visto las caras en diez ocasiones en la capital de España, con un balance de 8-2 favorable al conjunto blanco. La temporada pasada ambos equipos se enfrentaron en el Palacio de los Deportes dos veces, una en la fase regular y otra en el Top 16, con sendas victorias para los blancos (80-71 y 99-83).

Jugadores a seguir

KC Rivers ha vuelto al Real Madrid en plena forma. El escolta norteamericano ha batido sus topes de anotación en Euroliga y Liga Endesa en los dos últimos partidos (23 vs. CSKA y 21 vs. Baloncesto Sevilla). El ex del Bayern será sin duda una de las grandes amenazas para el Zalgiris.

Martynas Pocius vuelve de nuevo a la que fue su casa. El lituano fue un jugador muy querido por el madridismo durante las dos temporadas que vistió la camiseta blanca. Aunque ya no es el jugador que fue, Pocius sigue conservando su capacidad penetradora gracias a su brillante primer paso y su intensidad y energía.