Después de la derrota del pasado lunes ante el ICL Manresa, el FIATC Joventut está muy hundido, y se encuentra en una situación crítica. Una de las claves de la derrota fue que el juego interior estuvo anulado durante todo el encuentro. La Penya es uno de los equipos que más triples tira por partido, por no decir, el que más tira; y cuando los tiros desde la línea de 6,75 metros, no entran -como pasó el pasado lunes-, tienen que recurrir al juego interior, que no es de los mejores de la liga. Son muchos los partidos en que el Joventut tira más triples que tiros de dos, una cosa inusual en el baloncesto. Ante el Manresa, la Penya tiró 28 triples, de los cuales anotó seis. En tiros de dos, anotaron 19 de 36 intentos, pero en ese choque no hubo juego interior, estuvo anulado. Los jugadores del juego interior verdinegro hicieron pocas aportaciones, Llovet, sumó dos puntos, Suton 8 puntos, Miralles 2, Drame seis y Rakovic dos. Los mejores jugadores verdinegros, fueron los exteriores, Demond Mallet (15 puntos) y Sergi Vidal (11), en un triste partido del Joventut.

El partido del próximo domingo ante el Unicaja, será una prueba de fuego

La marcha de Savané 

Una de las muchas razones del bajón del equipo verdinegro fue la marcha de jugadores importantes como Sitapha Savané, el pasado verano, un jugador clave en el juego interior de la Penya la pasada temporada. El jugador africano se marchó al equipo de su vida, el Herbalife Gran Canaria, para retirarse allí. Con la marcha de Savané se apostó por el fichaje del "rookie" Ousmane Drame y los pívots del curso pasado, pero se esperaba mucho más de Drame. Tras el mal rendimiento del equipo de Salva Maldonado, a mitad de temporada se fichó al serbio Milovan Rakovic -que llevaba desde la pasada temporada sin jugar-. Con Rakovic, las cosas han mejorado algo, pero la mejora podría ser mejor. 

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