Con los Hawks contra las cuerdas y Cleveland mostrándose como el equipo más en forma de toda la liga en la actualidad, el cuarto partido de la eliminatoria se antojaba como el partido más importante de la temporada para Atlanta. Primero porque no han mostrado el nivel que se espera de ellos y segundo porque de perder, su temporada terminaría sin casi plantar cara a los intratables Cavaliers.

Los de Budenholzer debían cambiar muchas cosas para poder poner en aprietos a los de Lue. La defensa sobre James y Love, la aportación en ataque de sus hombres claves o el acierto desde la larga distancia eran algunas de las tareas pendientes para los de Georgia.

En los de Ohio, todo parece funcionar a las mil maravillas. Han ganado 14 encuentros de playoffs en su conferencia de manera consecutiva y hasta la fecha eran los únicos que no habían cedido una sola derrota en estos Playoffs.

Atlanta empieza fuerte

Parecía que el partido iba a ir por los mismos derroteros que el tercer encuentro. Mucha anotación desde la larga distancia de ambos equipos en el inicio y un Budenholzer muy nervioso paraba el encuentro para ajustar la defensa en el perímetro de los suyos. No funcionó demasiado pero es verdad que en ataque comenzaron a ver el aro con facilidad. La segunda falta de Thompson en cuatro minutos le relegaban al banquillo y con ello el juego interior de Atlanta supo sacar provecho bajo los aros.

Millsap se echó al equipo a la espalda y sus canastas dieron cierta ventaja a los de Georgia. Además, Love hizo un primer cuarto flojo con un 25% en tiros de campo y LeBron no era capaz de despertar a los suyos. Los Hawks supieron emparejar bien a Sefolosha con LeBron y este defendió muy bien al alero que perdía varios balones y al que se notó visiblemente nervioso con los árbitros en los dos primeros cuartos. 

El primer cuarto de Atlanta iba a terminar de manera casi perfecta. Primero un tapón de Humphries que sumados a sus dos triples hacían del reserva un buen revulsivo y después un parcial de 9-0 que levantaba al Philips Arena de sus asientos. Cleveland se quedaba en 26 puntos en un cuarto en el que la pasividad defensiva les condenó.

La máxima en el marcador iba a llegar nada más arrancar el segundo cuarto. Bazemore anotaba un gran triple que colocaba el +12 en el marcador y Lue volvía a pedir tiempo muerto. El resultado de éste fue inmejorable: dos triples de Love y tiros libres de Shumpert que daban esperanza a los de Ohio. Mientras tanto en los locales siguió destacando Sefolosha. El suizo se aprovechaba de la floja defensa de Cleveland para anotar en penetración en incluso conseguir tres rebotes ofensivos.

Las genialidades de Irving y la aportación de Shumpert, dejaban a los de Cleveland solo dos puntos abajo. Atlanta había hecho todo bien hasta el momento pero un minuto flojo le había dejado de nuevo en la casilla de salida, eso sí con Millsap en racha con 17 puntos y nueve rebotes al descanso.

Cleveland reacciona

Pocos minutos tuvieron que esperar los Cavs para verse por encima en el marcador de nuevo. Cuatro aciertos desde la larga distancia volvían a enviar un serio aviso a los Hawks y conseguía disparar el nerviosismo en los locales que pasaron unos minutos muy críticos sin saber cómo frenar los triples de los de Lue. Por suerte para ellos apareció un invitado a la fiesta nuevo, Sefolosha, que volvió a despertales. El escolta fallo dos tiros libres consecutivos pero cogió el rebote y encadenó cinco puntos consecutivos pese a ello, Love volvió a aparecer a los suyos se fueron con una ventaja de cuatro puntos al último cuarto.

Los últimos 12 minutos podían dejar a Atlanta fuera y así fue. El intercambio de canastas dejó dos interesantísimos minutos que decantaron el encuentro para los Cavaliers. Schroder conseguía 13 puntos en el último cuarto y daba la ventaja a los suyos. LeBron James conseguía a falta de 30 segundos poner a su equipo uno arriba y con la posesión para Atlanta, Schroder hizo la guerra por su cuenta, penetró y no pudo anotar ante el silencio de todos los aficionados de Atlanta. 

Otro 4-0 para los Cavaliers que pasan a ser los favoritos para la consecución del Anillo. No solo por las sensaciones, también porque llegarán frescos a las finales de conferencia ya que la otra eliminatoria marcha 1-2 y todo apunta a que será una eliminatoria larga.