Isaiah Thomas es lo mejor que le ha ocurrido a los Boston Celtics des de la marcha de Paul Pierce y Kevin Garnett en el verano de 2013. Únicamente le podría discutir esta consideración Brad Stevens, el hombre que está dirigiendo desde el banquillo el cada día más cercano regreso de los orgullosos verdes a la élite. Desde el parqué, el hombre encargado de llevar a buen puerto esta reconstrucción es el base.

Esta pasada madrugada, los Celtics se impusieron por 116-108 a los Philadelphia 76ers con 33 puntos de Thomas (13 de ellos en el último cuarto, su hábitat natural), lo que le colocan ya con 40 partidos consecutivos en los que al menos ha alcanzado la veintena de puntos. Una marca con la que hace historia con los verdes, y que le coloca a la altura de John Havlicek, una de las grandes leyendas de Boston. Si sumase 20 puntos o más en el partido que disputarán esta noche los Celtics en Chicago (02:00 de la madrugada en España), pasaría a liderar en solitario esta clasificación dentro de la franquicia más laureada de la historia de la NBA con 17 anillos en su haber.

Y es que para contextualizar y destacar más la hazaña del jugador de solo 1,75 de altura, hay que destacar que con Thomas el club de jugadores que en la historia de la Liga lograron 40 partidos seguidos de al menos 20 tantos en una misma temporada se amplía a solamente 17 integrantes.

La lista de 17 integrantes | Foto: ESPN

Y el gran estado de forma del ‘bajito’ base es aprovechado también por los Celtics, uno de los equipos más en forma de la liga con 11 victorias en los últimos 12 partidos. Thomas está al timón de un equipo que navega segundo en la Conferencia Este, a dos partidos de distancia de los Cleveland Cavaliers, pero con una fuerza y una ilusión que les hace capaces de luchar de tú a tú contra cualquiera y de llegar hasta dónde ellos se propongan.