Primer partido de las Finales de Conferencia Oeste entre Golden State Warriors y San Antonio Spurs. Los locales volvían al Oracle tras haber barrido a Utah Jazz en segunda ronda lo que le había permitido disfrutar de varios días de descanso. Los Spurs, tuvieron que sudar la gota gorda para conseguir llevarse la serie frente a Houston Rockets que se acabó decidiendo en un dominante sexto partido y sin Kawhi Leonard por lesión.

Durante los años de apogeo de estos dos equipos en el Oeste habíamos estado pidiendo unas Finales de Conferencia entre estos dos equipos, pero nunca llegaron. Esta vez, los dioses de baloncesto nos han recompensado con lo que avecina ser una serie apasionante. Golden State, aún sin Steve Kerr, y San Antonio Spurs con un Kawhi Leonard recuperado, lucharon hasta el final en un partido que acabó resolviéndose a favor de los de la Bahía en unos últimos segundos apasionantes.

San Antonio Spurs, dominante desde el primer minuto

Contra todo pronóstico, los Spurs dominaron el partido con su juego y consiguieron contener a los Warriors con una defensa espectacular. Kawhi Leonard enchufándola desde todas las posiciones y sacando provecho de los continuos despistes de Golden State. LaMarcus Aldridge hacía daño en una pintura que dominaron al completo en ambos lados de la cancha.

Se pusieron su corona de reyes del rebote y concedieron muy pocos a los Warriors tanto defensivos como ofensivos. Los de Popovich eran una auténtica máquina de matar; no había quien los parase. La excelente defensa desplegada permitió que Stephen Curry y Kevin Durant a penas vieran la bola en el primer cuarto, y en el segundo más de lo mismo. Los Spurs comenzaban su paseo triunfal hasta que una acción cambió el devenir del partido.

Doble lesión de Kawhi Leonard

San Antonio se marchó veinte puntos arriba al descanso (62-42) y a la vuelta, Kawhi Leonard tuvo que volver a vérselas con el maldito tobillo. El mismo que le hizo perderse el sexto partido, volvió a dar problemas tras tropezarse con uno de sus compañeros en el banquillo. A pesar de sus evidentes gestos de dolor, Leonard se mantuvo en el encuentro y siguió sumando para los suyos. Para colmo, ese tobillo volvió a torcerse; esta vez, con Zaza Pachulia como principal protagonista.

 

Realizó una suspensión para intentar anotar un tiro de media distancia y acabó aterrizando el mismo pie de la acción anterior en la zapatilla de Pachulia, lo que provocó una nueva torcedura. Esta segunda acción ponía fin al excelente partido de Kawhi Leonard que estaba fustigando a los Warriors y forzando la primera derrota en postemporada para los de Oakland. 

Golden State aprovechó la situación

Esta retirada del partido de Kawhi Leonard, se produjo cuando los Warriors comenzaban a reencontrarse con su juego. Después de muchos intentos, conseguían anotar de larga distancia y el ataque comenzaba a descongestionarse lentamente. La retirada de Leonard abría un nuevo abanico de posibilidades al no tener delante a uno de los mejores defensores de la liga. Stephen Curry y Kevin Durant apretaron el botón de destrucción masiva y comenzaron a reducir esa diferencia de 20 puntos anotando 39 en el tercer cuarto. Poco a poco conseguían meter el miedo en el cuerpo de unos Spurs que estaban sacando pecho incluso sin Kawhi.

El Oracle Arena se volcó con su equipo y finalmente consiguieron una “cómoda” ventaja de cinco puntos (106-111) con escasos segundos para la finalización del encuentro. Los Spurs reaccionaron defensivamente y consiguieron anotar tras la pérdida en el saque de Warriors y con dos tiros libres de Patty Mills se ponían a solo un punto. Stephen Curry, conseguía una canasta muy importante a la altura de la línea de personal para cerrar el partido que terminaría con el intento de forzar la prórroga de Aldridge y posteriormente de Mills con los tiros libres.