Uno de los duelos más míticos de la liga Endesa fue el escogido para dar el pistoletazo de salida a la temporada 2017-2018. Las numerosas ausencias fueron la primera noticia del encuentro; en Baskonia faltaban Tornike Shengelia, Patricio Garino, Jordan McRae y Rodrigue Beaubois; mientras que en el FC Barcelona Lassa fueron Ante Tomic, Pierre Oriola y Victor Claver los que vieron el partido desde la tribuna del Palau Blaugrana. Antes de comenzar el encuentro, Marcelinho Huertas recibió un homenaje de parte del club blaugrana y la afición por sus años en el club.
Pablo Prigioni dio la primera muestra de su carácter saliendo de inicio con Rinalds Malmanis, un jugador del filial. Los vascos tomaron la primera ventaja del choque partiendo de una defensa dura y transiciones rápidas hacia el aro contrario. Jayson Granger y Janis Timma fueron los que marcaron el ritmo anotador baskonista en los primeros compases del encuentro. Por parte catalana, Aleksandar Vezenkov, desde el 6'75, mantuvo a los de Sito Alonso en los primeros minutos del partido. Adam Hanga entró a pista pisando fuerte y dio carácter al Barça Lassa, por ello los blaugranas se acomodaron en el marcador, pero continuó por detrás. (24-26)
Prigioni no dejaba de mover el banquillo buscando que los hombres importantes tuvieran el descsanso suficiente, en especial los bases. Por contra, Sito Alonso prolongaba el tiempo de juego de sus jugadores, práctica habitual en el técnico madrileño como ya se pudo ver en Baskonia la temporada anterior.El partido estaba muy igualado, pero en el segundo cuarto perdió la fluidez que tuvo en el primero. El Barça se adelantó gracias a Thomas Heurtel, que estuvo desatado, y Baskonia pasó por un bache. Los del coach argentino se precipitaban en ataque, cometían errores de más y en defensa permitían que el rival desplegase su juego de manera cómoda. El Barça castigaba los despistes ofensivos de Baskonia en el otro aro y conseguía terminar en canasta acciones rápidas y sencillas. Pese a ello, Ilimane Diop puso a su equipo a tres puntos antes de marchar hacia le túnel de vestuarios. (45-42)
Ilimane Diop acabó la primera parte y comenzó la segunda demostrando que Prigioni no se equivocaba cuando dijo que podía anotar de tres puntos con asiduidad. Baskonia volvió a asumir su lugar en el partido de la mano de Jayson Granger y con mucho trabajo en ambos lados. Seraphin se comía a Diop, dada la diferencia de kilos, pero el senegalés estaba frustrado. Los gasteiztarras se hicieron con una ligera ventaja al final del periodo que les daría comodidad para afrontar los últimos diez minutos. (56-67)
Marcelinho Huertas, pese a su experiencia, sigue volviéndose loco y, por ende, enloqueciendo a sus compañeros cuando siente una mínima libertad. Ambos equipos jugaron los primeros minutos del último cuarto sin rumbo y con jugadas muy precipitadas. Ninguno de los dos jugaba a nada, se notó la falta de minutos y pretemporada. Janis Timma realizó muchos lanzamientos precipitados y sin sentido y la inexistencia de rebote baskonista provocó que el Barça Lassa empatase el encuentro. Pau Ribas, que volvía tras una larga lesión, fue el artífice de la remontada, no tanto por su aportación anotadora, sino por el liderazgo que ejerció en ambos lados de la cancha. Thomas Heurtel dejó claro porque el Barça ha apostado por él para el nuevo proyecto con dos jugadas que devolvieron el liderato a los locales. Un 2+1 de Hanga tras un triple de Janning devolvían los cinco puntos de ventaja al Barça, que se haría con la primera victoria en la liga Endesa 2017-2018.
La afición culé vuelve a creer en el proyecto de la sección de baloncesto. El equipo se mostró muy serio, pese a los baches que tuvo que superar el conjunto. Thomas Heurtel, Adam Hanga y Aleksandar Vezenkov realizaron un gran encuentro y se erigieron como los referentes ofensivos del equipo. Por su lado, Baskonia mostró una versión beta, dadas todas las bajas, pero dejó muestras de que será un equipo duro, correoso y que aspira a todo. Pablo Prigioni dejó claro que el puesto de entrenador ya es suyo, la adaptación al nuevo oficio no le llevará más tiempo y dará que hablar.