El resultado del partido ya augura que, en el encuentro en sí, han predominado, sobre todo, las defensas. Y así fue, pero el resultado final también es un claro reflejo de lo poco que han anotado ambos equipos. En ciertos momentos del encuentro, los errores de cara al aro tanto de MoraBanc Andorra como de Iberostar Tenerife, ha resultado sorprendente. El choque ha sido 'café para muy cafeteros'.

En el primer periodo se ha impuesto la defensa cerrada de los tinerfeños, que se le ha atragantado a los de Joan Peñarroya. Aún así, los de Nenad Markovic tampoco han sido capaces de aprovechar la nula capacidad anotadora de los locales, pues solo han podido conseguir una ventaja de ocho puntos. Los primeros 10 minutos han terminado 5-13 y el máximo anotador ha sido Rodrigo San Miguel con 7 puntos, es decir, dos más que Andorra y más de la mitad de los puntos de su equipo. 

En el segundo cuarto, los isleños han alcanzado la máxima diferencia a favor, con el 5-17 obtenido en el primer minuto de juego. A partir de ahí, MoraBanc ha ido recortando distancias, con paciencia y lentitud, e incluso han logrado acercarse a 3 puntos (16-19) cuando quedaban dos minutos para el descanso del encuentro. Oliver Stevic y Jaime Fernández fueron los artífices del despertar anotador de los andorranos, aunque no pudieron igualar el partido o ponerse por delante. Javier Beirán puso a los suyos a 5 puntos tras un triple a falta de 20 segundos para acabar el partido. El electrónico reflejaba un alarmante 18-23 habiendo jugado ya 20 minutos, pues normalmente es un marcador que se alcanza en un solo periodo. 

Las defensas mandaban y los tiros fallados eran los auténticos protagonistas del partido entre Tenerife y Andorra. Con muy poca lucidez en ambos conjuntos, prosiguió el transcurso de un encuentro en el que era más común un fallo o una pérdida que una canasta. MoraBanc volvió a amenazar el mandato canario, pero, de nuevo, los de Markovic volvieron a marcharse en el electrónico. Sin embargo, todos los fallos en los lanzamientos a canasta, así como las pérdidas y la poca fluidez en ataque produjeron que Iberostar Tenerife anotase aún con menos frecuencia que en los dos periodos anteriores. Este hecho provocó que los hombres de Joan Peñarroya lograsen colocarse a tan solo un punto (34-35) cuando el crono llegó al 00:00. Andorra pudo afrontar los últimos 10 minutos con más confianza que los 30 minutos anteriores. 

En el último cuarto, uno de los dos equipos anotó como suele hacerse en ACB, mientras que otro siguió luchando contra sus fallos y la defensa rival. Los hombres que consiguieron alcanzar un buen ritmo anotador, fueron los de Peñarroya, que ya en los primeros 65 segundos de cuarto periodo, consiguieron ponerse por delante en el electrónico y anotar de manera más regular. Jaime Fernández se erigió como el líder anotador de Andorra y fue clave para que los locales se alzasen con el triunfo final. El ex de Estudiantes anotó 14 puntos en el último periodo (uno más que todo Iberostar Tenerife en el mismo intérvalo de tiempo) para dar la ventaja clara que necesitaba el vencedor del encuentro, pues en un partido de estas características, el equipo que consigue un +7, tiene muchos números de ganar. Los de Markovic no fueron capaces de hacer frente a sus propios fallos y acabaron perdiendo el partido. 

En uno de los peores partidos de la temporada hasta el momento, se pudo ver a dos equipos muy fuertes defensivamente y con coraje para levantar situaciones adversas. MoraBanc Andorra sale muy reforzado del partido, pues necesitaba una victoria como el comer y, hacerlo de esta manera, dará más confianza al equipo para afrontar el siguiente encuentro de Eurocup contra Paris Levallois en La Bombonera.