Los peores pronósticos se hicieron realidad y Blake Griffin se perderá los próximos dos meses de competición.

El ala-pívot de Los Angeles Clippers tuvo que abandonar el parqué del Staples Center hace dos madrugadas durante el último cuarto del derbi angelino ante los Lakers, adoleciendo problemas en su rodilla izquierda.

Las pruebas a las que ha sido sometido el jugador All-Star han detectado que dichos problemas son lo suficientemente graves como para mantener a Griffin fuera de las canchas justo en la temporada en la que se estaba erigiendo como el líder de unos Clippers huérfanos de Chris Paul.

El de Oklahoma City estaba promediando unos sobresalientes 23,6 puntos y 7,9 rebotes además de experimentar una mejora sensible en su lanzamiento triple. Capaz de jugarse las canastas sobre la bocina y anotarlas, Griffin daba por fin la sensación esta temporada de dejar atrás esa época de lesiones y estancamiento de nivel. 

Ahora le toca volver a remar para recuperarse en el menor tiempo posible y estar cuanto antes disponible para ayudar a unos Clippers que van a sufrir y mucho durante la ausencia de su mayor estrella, a la que firmaron un contrato máximo el pasado verano, comenzando una reconstrucción en torno a él.

Dicha reconstrucción no parece que vaya a llegar a buen puerto, al menos esta temporada, ya que pese a conseguir su tercera victoria consecutiva, estos Clippers no dan buenas sensaciones y se mantienen con récord negativo. Parte de culpa recae en la poca aportación de Gallinari, fichaje de relumbrón en el último mercado, a la que hay que sumar la lesión del base titular Patrick Beverley y la ya mencionada de Blake Griffin.

La responsabilidad le llega ahora a Doc Rivers, técnico del conjunto angelino, que deberá ingeniarselas para tapar el enorme hueco que deja Griffin, sobre todo en ataque. Montrezl Harrell y Sam Dekker se antojan como posibles sustitutos si miramos el banquillo, aunque también cabe la posibilidad de variar la posición de Gallinari en la pista, alineándolo como ala-pívot en lugar de alero.

Sea como sea, a los Clippers se le acumulan los problemas y con esta lesión pueden estar despidiéndose de sus opciones de entrar en playoffs en el mes de noviembre.