DeMarcus Cousins sigue sin dejar a nadie indiferente en la NBA. A pesar de aportar grandes números a lo largo de su carrera, la mayoría de portadas que protagonizaba se debian a asuntos extradeportivos, como sus "malas pulgas" con árbitros y rivales. Sin embargo, esta temporada parece haber dado el salto definitivo para convertirse en una superestrella de la mejor liga de baloncesto del mundo.

Anoche, Cousins completó un partido de ensueño con 40 puntos, 22 rebotes, cuatro asistencias y cuatro tapones, todo esto con un buen 46% en tiros de campo. Si pudiéramos ponerle una pega a la noche del pívot de los Pelicans se podría hablar de su 66,7% en tiros libres, cifra sin duda mejorable para un jugador con semejante talento.

Como guinda a su gran actuación, los Pelicans lograron una nueva victoria ante los Nuggets (123-114) y se sitúan en la octava posición del salvaje Oeste (que da acceso a playoffs) con un récord de 13 victorias y 12 derrotas. Cabe destacar que es la segunda victoria en tres partidos para los de Nueva Orleans durante la ausencia de su otra gran estrella, Anthony Davis. "La Ceja" se encuentra aún recuperándose de las molestias en el muslo que sufrió hace cinco días.

Volviendo a la figura individual de DeMarcus Cousins, parece que esta temporada está opositando para ser incluido, como mínimo, en el mejor quinteto de la NBA. Sus magníficos números de 25,9 puntos, 12,6 rebotes y 5,1 asistencias lo justifican. Probablemente estemos ante el mejor center de la NBA y uno de los candidatos al MVP si continúa esta progresión y si los Pelicans son capaces de mejorar su récord de aquí al término de la regular season.

Como dato curioso, hay que saber que no es la primera vez esta temporada que Cousins alcanza estas sobresalientes cifras en una noche. El pívot de Alabama aportó 41 puntos y 23 rebotes el 26 de octubre de este mismo año en otra victoria de sus Pelicans, esta vez en Sacramento, frente a su ex equipo los Sacramento Kings.