Desde que llegara Doc Rivers al banquillo del equipo azul del Staples allá por 2013, los Clippers acostumbran a ser un equipo que vive en una relativa calma este último día de traspasos, siendo del selecto grupo de los equipos que se hacen con nuevos efectivos para mejorar su roster de cara a la post-temporada y encarar con más y mejores jugadores la recta final (y por cierto las más importante) de la temporada NBA. 

Este año los movimientos del GM Scott Warner son una incógnita. Por un lado, DeAndre Jordan y Lou Williams son ya denominados veteranos y podrían pensar en quitarse el 'muerto de encima' y conseguir un trade beneficioso para todas las partes, pero si se analiza friamente y con calma los números de ambos en lo que va de temporada la cosa está como para pensárselo dos veces. Pero tampoco mucho más, porque el contrato de los dos expira pronto y algo tiene que hacer Warner. Los Cavs se quieren hacer con Jordan y han ofrecido a los angelinos a Tristan Thompson (contrato millonario) y una posible ronda alta de los Nets para el próximo Draft, algo de lo que se oirá hablar bastante las próximas horas y de lo que llegrán noticias, sin lugar a dudas. Williams y sus siete millones de dólares de contrato es un movimiento mucho más asumible para cualquier franquicia, y para qué engañarse, un jugador al que ningún o muy pocos entrenadores harían ascos a la hora de hacerse con sus servicios.

Turno ahora para Danilo Gallinari. El pívot italiano, lesionado en el glúteo izquierdo y causando baja de manera indefinida desde el pasado mes de diciembre, podría ser otro de los cromos en salir, ya que desde que llegó al equipo californiano, ha estado más tiempo de baja que jugando, un problema grave teniendo en cuenta que el contrato del italiano es de 65 millones en tres años. Otro que puede ser traspasado es el alero texano de 30 años Wesley Johnson, el cual es un trade fácil teniendo en cuenta el contrato (5.8 mill $ este año y 6.2 mill. $ el próximo). Algo que hace el resto de GM de la NBA se piensen hacerse con Johnson es lo poco estable que es en el juego y la opción de jugador que tiene en su contrato. En caso de marcharse sería también supondría perder una futura elección en el Draft.

A día de hoy la respuesta más difícil sería a la pregunta, ¿con qué jugador o jugadores completar el equipo?. Bien, la respuesta no es fácil y es que, los Clippers no buscan tapar huecos, solo se moverían en caso de que DeAndre Jordan saliera y sería para hacerse con un pívot que hiciera las veces del de Houston.