Malik Rose, exjugador de la NBA, ha sido galardonado con el premio a mejor ejecutivo del año de la NBA Gatorade League (o G League). El de Filadelfia lleva cuatro años trabajando en las oficinas de los Atlanta Hawks, pero es el primer año que desarrolla la función de General Manager en la franquicia de la antiguamente conocida como Liga de Desarrollo (o D-League).

El exjugador de Hornets, Spurs, Knicks y Thunder es el principal responsable de las adquisiciones del veterano Jeremy Evans, fichado del BC Khimki y cuyo promedio es de 15.3 puntos y 9.9 rebotes por encuentro, y de Tyler Cavanaugh, un jugador no drafteado que ha logrado promediar 14.5 puntos y 7.3 rebotes. Rose también tiene el mérito de haber seleccionado en el draft de la G League a Raphiael Putney, 16.3 puntos y 8.2 rebotes por partido, y Jaylen Morris, 12.6 puntos de promedio con un 52 % en tiros de campo. Cavanaugh y Morris son jugadores que ya han firmado contratos multianuales con los Atlanta Hawks, por lo que han resultado todo un acierto no solo para el equipo, sino también para la franquicia de la NBA.

Además de las adquisiciones de jugadores clave para la franquicia, Rose puede sumar a sus éxitos personales la gran temporada de los Erie BayHawks. El filial de los Hawks ha logrado la tercera posición en la Conferencia Este con un récord de 28 victorias y 22 derrotas, y anoche se impuso a los Lakeland Magic (filial de los Orlando Magic) por 90 a 86 en el partido que decidía la primera ronda de los PlayOffs.

Rose, en declaraciones para AJC Sports, aseguró que “tiene planeado pasar mucho tiempo en Erie” y agradeció a los Atlanta Hawks por haber confiado en él para desarrollar un puesto que es “una gran responsabilidad y requiere un gran esfuerzo”.