Ya está aquí, la fase de la verdad de la mejor liga del mundo, el espectáculo está servido y en el Este, destaparán el tarro de las esencias el primero contra el octavo, o lo que es lo mismo esta temporada, los Toronto Raptors contra los Washington Wizards, ¿descompensado?, para saberlo solo hacen falta unas horas para comprobar si, es fruto de la casualidad o si se confirma el rendimiento que han mostrado ambos en la regular season.

'We the North' 

Campaña casi perfecta, inmejorable para los canadienses que han demostrado estar en un estado de forma formidable durante prácticamente toda la temporada, destronando a los Cleveland Cavaliers y a Boston Celtics del primer puesto de Conferencia Este (eso sí, ambos han tenido lesiones importantes y varias modificaciones en sus roosters). Con la clasificación como primeros desde hace varias semanas, el último tramo de la competición ha servido para dar descanso (aunque han ganado cuatro de sus últimos cinco partidos, salvo el último ante Miami Heat) a unos jugadores que vienen con más ganas que nunca de demostrar que esta vez si estarán a la altura.

Siempre se ha reprochado a Kyle Lowry y a DeMar DeRozan que, en la temporada regular si dan el nivel pero que, cuando llegan los playoffs y los momentos decisivos 'desaparecen'. Aún así, con el factor cancha asegurado hasta unas hipotéticas Finales de la Nba, parecen decididos a aprovechar la irregularidad de sus rivales más directos y, a dar la cara escoltados de esta vez sí, por una segunda unidad que acompaña y lo quieren hacer dando un golpe de autoridad ante los Wizards.

No hay más margen de error

Por su parte, los de Washington son la otra cara de la moneda este año. Un proyecto similar al de su oponente, ambicioso y con jugadores de gran talento pero que siempre 'se desinflan' en los momentos clave y no 'llegan a nada'. Esta campaña los capitolinos han hecho una fase regular para olvidar, en muchos momentos han estado fuera de los primeros puestos, eso sí, con la importante baja de John Wall.

La verdad es que el final de temporada ha sido para hacérselo mirar, trece partidos de los que solo han conseguido vencer en tres y entrar de forma muy ajustada en la postemporada. Aún así entre estas victorias se encuentran partidos ante equipos duros como Boston Celtics y San Antonio Spurs, que también cabe decir, mermados por las lesiones. No ha sido el mejor año pero, ahora toca sacudirse de estos malos resultados y encarar los playoffs para pasar a la siguiente fase si no quieren dejar en fracaso la campaña.

La igualdad es la nota dominante

A pesar de que la temporada de ambas franquicias ha sido totalmente distinta, en cuanto a los duelos directos entre ambas, no han podido ser más disputados, además de la poca ventaja de la una sobre la otra en el marcador, dichos choques acabaron con dos victorias para cada una y, cabe destacar que sin John Wall en ninguno de estos partidos. Las figuras que más destacaron y que pueden ser determinantes (sin contar al base de los Wizards) fueron las de DeRozan en Toronto y la de Bradley Beal en la de Washington. 

Con estos talentos la balanza se puede desequilibrar en cualquier momento, pero de esto nada sirve si no consiguen estar en el estado de forma óptimo para hacer frente a este momento decisivo. Por mucha calidad que exista, finalmente este estado físico puede ser determinante y junto con las pizarras de Brooks y Casey para decidir un duelo que puede estar más igualado de lo que parece 'a priori'.

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