Ignacio Azofra de la Cuesta (Madrid, 1969), más conocido como Nacho Azofra en todo el territorio nacional y por méritos propios también en el continental, fue un jugador de baloncesto ligado a la disciplina del Club Estudiantes, en el que consiguió forjarse un nombre en el mundo de la pelota naranja y mostrar a todos los amantes de dicho deporte las tremendas cualidades que tenía en la última década del siglo el base de la capital. Como jugador histórico reconocido por la ACB, los micrófonos y cámaras de VAVEL no dudaron en reunirse con él y disfrutar de una entretenida conversación en la que el inteligente cerebro colegial aporta detalle de su pasado, aunque sin analizar el presente e intentar descifrar el futuro más próximo.

Pregunta: ¿Cómo se siente al volver al Polideportivo Antonio Magariños, la que ha sido su casa durante tantos y tantos años?

Respuesta: Continúo viniendo a Magariños un par de días a la semana, a ver entrenar, a hablar con los chicos, a aconsejarlos y, a decir verdad, a rememorar buenos momentos. Lógicamente para mí no puede suponer la misma emoción que a John Pinone o cualquiera de los históricos de aquella mítica final de la Copa Korac de 1992 puesto que ellos viven mucho más lejos, hace bastante tiempo que no vienen y desafortunadamente solo suele ocurrir en momentos extraordinarios. Pero por supuesto que siempre es bonito ver todas las muestras de cariño hacia mí cuando me ven o hacia cualquiera de nosotros. Me emociona gratamente y es algo que sinceramente me encanta y me hace muy feliz.

P: Al final el apodo de El más listo de la clase ha quedado para la eternidad, ¿cuáles cree que han sido sus méritos para lograrlo?

R: Realmente, que en paz descanse, quien me lo llamaba que era Andrés Montes, siempre ponía un mote a cada uno, y aprovechando que estudié y estaba jugando para el Ramiro de Maeztu, pues le vino al guante. Siempre queda feo que te llamen el más tonto de la clase, y por ello me comenzó a llamar el más listo. De él viene el mérito y se lo agradezco y agradeceré siempre.

P: Desde que abandonó la disciplina del baloncesto hasta el día de hoy, ¿qué cambios son los que cree que más han variado en el Estudiantes y en el propio deporte?

R: Han cambiado muchas cosas en la entidad. Hace veinticinco años, para empezar, subías a la oficina y te encontrabas a tres personas, ahora ni sé cuántas pueden llegar a haber. También el aspecto del Magariños. El juego del baloncesto en general actual con el que se practicaba antes, los jugadores son distintos y siempre cambian, pero no hay más que decir que antes teníamos treinta segundos de posesión y ahora solo se cuentan con veinticuatro, lo cual ha hecho que las transiciones sean mucho más intensas y que exista menos tiempo para pensar y poder tirar el balón. Este ha sido en mi opinión el gran cambio, para Estudiantes como para el baloncesto en sí.

Conversación entre Nacho Azofra y Adrián Lázaro | VAVEL
Conversación entre Nacho Azofra y Adrián Lázaro | VAVEL

P: ¿Dichos cambios en el baloncesto han afectado a la entidad o la han reforzado?

R: Afortunadamente los valores de Estudiantes continúan siendo los mismos. Por supuesto que se adaptan a medida que evoluciona la sociedad. El chaval joven no tiene nada que ver cuando yo lo era y venía a animar con la Demencia, con el de ahora. Básicamente se siguen sintiendo los colores, que es lo más importante, pero es otra forma de animar. Los pabellones eran mucho más reducidos, más concentrados y en general, más familiar, creo que los partidos tenían más ambiente, casi podías darle una colleja al árbitro cuando pasaba por tu lado. Pero en esto consiste la vida: "hay que cambiarlo todo para que todo siga igual".

P: Precisamente, la cantera del Estu junto a la de la Penya siempre ha sido la referente en toda España, ¿opina que sigue siendo de esta manera?

R: Por supuesto. Edgar Vicedo y Darío Brizuela, los dos jugadores canteranos de referencia en el equipo creo que ya están a un nivel más que suficiente para rodar en ACB. ¿Cuántos minutos llevan ya disputados en cuántas temporadas?, está más que contrastado, deben seguir mejorando porque tienen bastante techo por superar. De igual manera, quizá Edgar ha tenido más minutos que Darío por puesto y por tipo de juego. Hasta dónde llegarán es algo que está en sus manos. Mi consejo es que entrenen duro y que se paren a pensar de vez en cuando en aprender de sus errores para poder continuar evolucionando. Yo nunca digo aquello de que hagan caso absoluto al entrenador, ellos deben pensar también por sí mismos.

P: Quizá lo que más añoran los veteranos aficionados colegiales es ver imágenes de la mítica consecución de la Copa del Rey hace 26 años junto a la Copa Korac, que se está enseñando a los más jóvenes y se impregnan de tal sentimiento. ¿Cree sinceramente que algún día se podrá repetir lo conseguido en 1992?

R: A corto plazo me parece que no. Desgraciadamente pienso que habrá que esperar bastantes años. Aunque quedes primero de liga este año, no juegas directamente la Final Four, hay un montón de rondas a superar para llegar hasta ahí. Es absolutamente injusto, pero hay que acatar las normas y seguir luchando y trabajando para conseguirlo.