Esto se acaba. Sólo seis jornadas quedan por disputar en esta apasionante Liga Endesa, donde su ya famosa dureza e igualdad se sufre partido a partido. Pese a ello, la competición ha ido colocando a cada club en su lugar, premiando o castigando su desempeño y regularidad. 

De menos a más

UCAM Murcia ha demostrado este año que, por encima de las individualidades, son un equipo con mayúsculas. La mejor defensa de la Liga Endesa (apenas encaja 76 puntos por encuentro) tiene en el compromiso su principal seña de identidad. Hay jugadores con evidentes condiciones atléticas para esta suerte (Rojas, Soko, Tumba...), pero es desde el bloque de donde parte el éxito. Y para conseguirlo, el metrónomo Ibon Navarro mantiene entre los principales diez jugadores de la rotación un equilibrio absoluto en el reparto del tiempo en cancha (nadie excede los 25 minutos y nadie baja de 15).

El otro factor diferencial del equipo es su capacidad para generar segundas opciones de tiro en el rebote de ataque. Con más de 12 rechaces por encuentro en el aro rival, es fundamental aportación de especialistas como Kevin Tumba o Augusto Lima, pero también de un exterior como Rojas que demuestra en cada momento una actitud encomiable. La ausencia de grandes generadores de juego hace necesario que se aprovechen factores del juego como el rebote o incluso el tiro desde el 4.60 para equilibrar las fuerzas con equipos de mayor potencial ofensivo.

Haber alcanzado la Final Four de la Basketball Champios League (que disputarán del 4 al 6 de mayo en Atenas) es un logro que puede convertirse en una proeza, pero que ha supuesto un desgaste físico importante en la rotación. A la cita de este domingo frente a los aragoneses, los pimentoneros se presentan con las dudas de Tumba, Urtasun y Soko, mientras que Rojas y Lima arrastran molestias pero se espera que sean de la partida. 

Nada que perder... o casi

Mientras tanto, Tecnyconta Zaragoza llega a Murcia tras 4 derrotas consecutivas que han puesto al equipo a las puertas del desastre. Las numerosas vicisitudes sufridas por el equipo en esta temporada han ido debilitando el potencial de la plantilla rojilla hasta llegar a un punto donde casi todo el ataque dependía de Gary Neal. Y la defensa ha perdido su agresividad de forma preocupante permitiendo cerca de 88 puntos por encuentro (segundo peor registro de la competición).

Con la plantilla existente, la reacción parecía imposible y la secretaría técnica tuvo que ponerse manos a la obra. El primer refuerzo era Paul Stoll,  que llegaba tratando de compensar la pérdida de un superclase como Bo McCalebb. La empresa parecía complicada, y finalmente se ha demostrado fallida. La aportación del playmaker internacional mejicano ha ido de más a menos hasta el punto de apenas contar para Pep Cargol en los últimos encuentros.

Más acertada parece la llegada de un Xavi Rey que tenía que hacer olvidar al puntal defensivo del equipo, Jarvis Varnado. En apenas dos partidos ha dejado sensaciones positivas en la pintura maña, hasta el punto de ser capaz de frenar el poderío interior de Valencia en la última jornada y sumando una valoración de 16.

Y esta misma semana el club anunciaba dos fichajes de calado que deben aportar un salto de calidad considerable a la plantilla. Procedentes de todo un cuadro de Euroliga como Estrella Roja llegaban Dylan Ennis y Milko Bjelica. El combo canadiense debe permitir al capitán Tomás Bellas reducir sus minutos en cancha y mejorar su aportación, pero además recuperará el registro de recuperador de balones y defensor sólido del que carece el equipo desde hace meses. Y Bjelica supone la llegada de un anotador interior sólido que puede jugar como 'cuatro' abierto o como center, en ambos casos con la amenaza de su tiro exterior. Un buen complemento para De Jong o Rey, aunque el primero deberá esperar a la próxima jornada al entrar en el listado de bajas por sus problemas en el gemelo.

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