Las semifinales de conferencia siguen su curso, y en el caso del oeste parece que la emoción va a durar unos días más. La pasada madrugada, los New Orleans Pelicans lograron tumbar a los Warriors en casa, evitando una situación de 3-0 muy favorable para los de la bahía. Además, los Houston Rockets lograron recuperar el factor cancha al cosechar un triunfo de capital importancia en Utah.

Golden State Warriors 100- New Orleans Pelicans 119

Tras los dos primeros encuentros en San Francisco, los Warriors habían logrado seguir el guión establecido y se pusieron con una ventaja de 2-0 en la serie. Los Pelicans no mostraron buenas sensaciones en el primer partido, pero el segundo fue otra historia a pesar de la derrota. La franquicia de Louisiana se reafirmó en la buena dinámica de juego y logró la victoria la pasada noche frente a unos Warriors que poco pudieron hacer. Los pupilos de Alvin Gentry salieron concentrados desde el inicio, y al final del primer cuarto ya habían establecido una renta que no se les escaparía. De hecho, los 'dubs' se mantuvieron relativamente cerca en el marcador, pero cada acercamiento suponía un nuevo golpe de unos Pelicans liderados por Anthony Davis y Rajon Rondo. Un gran tercer periodo terminó por aniquilar cualquier esperanza de los vigentes campeones, que tendrán una nueva oportunidad el próximo domingo para intentar colocar el 3 a 1.

Los mejores del partido por parte de los locales fueron Anthony Davis, que finalizó con 33 puntos y 18 rebotes, y un espectacular Rajon Rondo que fue capaz de repartir 21 asistencias y capturar diez rebotes. Por parte de los Warriors, Draymond Green estuvo a una asistencia de completar un triple-doble, y a pesar de no tener buenos porcentajes de tiro Klay Thompson encestó 26 puntos.

Houston Rockets 113- Utah Jazz 92

El marcador, a pesar de la renta de 21 puntos de los Rockets, no refleja la paliza que realmente fue. Un triple en los primeros segundos de Ingles fue la única ventaja del partido de los locales. La franquicia de Texas estableció una renta que estuvo cerca de los 40 tantos en el tercer periodo, una humillación sin precedentes para esta plantilla de los Jazz, que estuvo irreconocible de principio a final. James Harden completó una gran noche al anotar 25 puntos y repartir 12 asistencias, mientras que Eric Gordon fue el principal arma de los visistante desde el banquillo al encestar 25 tantos. Por parte de los Jazz, Donovan Mitchell completó su peor actuación en los playoffs (una noche después del descalabro de Ben Simmons); malas decisiones de tiro, superado a ambos lados de la cancha y echando de menos a un Ricky Rubio que le releve en las tareas de organizador, el rookie tan sólo pudo anotar diez puntos. Por otro lado, Clint Capela superó claramente a Rudy Gobert en la pista, una de las claves para que la eliminatoria se decante a favor de uno o de otro.

La victoria concede a Houston una ventaja de 2-1, y ambos equipos se verán las caras nuevamente el próximo domingo en Utah.

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