Grayson Allen ya está en la NBA y solo hemos tenido que esperar dos partidos en la Summer League de Utah para que protagonice su primera pelea. Ha llegado con Trae Young, el novato de Atlanta Hawks que tanto promete pero que ha comenzado con mal pie. Como se puede observar en el vídeo, Allen estaba defendiendo a Young muy de cerca para evitar que tirara de tres, una de sus especialidades a pesar de los malos porcentajes con los que ha arrancado en la NBA.

Sus compañeros de equipo y los árbitros evitaron que fuera a más y no tardaron en separarlos. Ambos recibieron dos técnicas para dar un aviso de que aunque estos partidos no signifiquen mucho, no pueden manchar demasiado el juego limpio. Allen llega a la NBA con una muy mala reputación de la universidad. Era considerado casi como un villano por su actitud agresiva con respecto al resto de jugadores en la pista. Muchos analistas y aficionados le pusieron en su día la etiqueta de “jugador sucio” y Allen está al tanto de estas críticas.

Tras el partido, dijo que quiere representar a los Jazz de la manera correcta: Se que vengo de Duke y quiero continuar representando a mi universidad de la manera correcta, pero ahora que tengo la camiseta de los Jazz puesta, quiero representar también a los Jazz de la manera correcta. No me importa que me etiqueten, que me odien o que me amen, me da igual. Me preocupaba mucho por esas cosas en Duke y fue un gran error, he pasado página. El amor por el baloncesto hace que todo lo demás se quite de en medio”.

Por su parte, Trae Young también habló sobre la diferencia entre la universidad y la NBA. Hay que recordar que Young fue el máximo anotador de todo el país con 27,4 puntos por partido. “El juego es mucho más físico, pero eso es lo que quieres para mejorar y dar el siguiente paso. Quiero que sea competitivo, que sea todo un desafío, una experiencia para aprender. Este es solo mi segundo partido, todavía queda un gran camino por recorrer”.