Hay gente que dice que en la NBA no se juega duro hasta los Playoffs, pues a toda esa gente le vendría bien ver este partido disputado en Utah para convencerse de que eso no es así: récord de anotación de los locales al descanso y récord de triples en un cuarto, todo ello siendo récords de la franquicia lógicamente. Y ante los actuales campeones, un equipo lleno de superhéroes armado hasta los dientes que necesitó su mejor baloncesto y una marcha extra de los titulares para conseguir llevarse la victoria ante unos Jazz que, este año, muy pocos equipos van a poder ganarles. Guarden esta línea, porque va a ser así.

Pero todo fan de la NBA sabía que este partido era imperdonable, se tenía que ver y los que hoy tenemos ojeras agradecemos el esfuerzo de aguantar para verlo. Mucho, pero mucho sufrimiento, pero finalmente segunda victoria de Golden State por solo un punto ante los Utah Jazz. Los locales salieron a por todas y más incluso, con solo 24 minutos llevaban un partido que era de auténtico récord: metieron nada menos que 41 puntos en ocho minutos y lograron diez triples en ese cuarto, lo que les daba una proyección de más de 200 puntos, 47 puntos en total en el cuarto para endosar su récord lógicamente y la mayor tortura que Golden State ha recibido en 12 minutos. Estaban dando un repaso de libro a los campeones, poniéndoles finos en todas las facetas del campo.

Foto: @nba
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Pero no se equivoquen, los Warriors no estaba haciendo mal partido, solo que enfrente estaba un equipo al que le estaba saliendo absolutamente todo gracias a la inspiración de los divinos: Ingles desde el triple estaba siendo el aniquilador perfecto, Mitchell sigue siendo ese niño que tiene cada vez más fuerza e inspiración ante los titanes de su mundo, Ricky dirigía y ordenaba con algunos detalles llenos de magia y Gobert busca pillar todos los rebotes y anotar ante Jones y un siempre combativo Draymond Green.

De un igualado 34-32 nos fuimos al descanso con un 47-37 y una diferencia de 12 puntos, un 81-69 que marcaba el récord histórico de la franquicia del Salt Lake en su historia.

Pero enfrente tenían, por desgracia, a uno de los mejores equipos que ha habido en la historia del deporte americano, y encima inspirados, es lo que se suele decir además, que 48 minutos ante los Warriors son muchos minutos, y eso le pasó a los Jazz: muchas carreras y huecos en un tercer cuarto en el que notaron el cansancio, Curry vio la herida y a base de tiros de dos dejó la ventaja en seis puntos a falta de otros 12 minutos.

Pocos minutos de descanso para Durant, el que más estuvo en la pista, cosa que luego se reflejó en las estadísticas. Mitchell no pudo aguantar todo el partido en modo Supermán, e Ingles ya no recibía tantas pelotas para tirar de tres, la velocidad de movimiento de balón de Utah disminuyó poco a poco y ese fue el momento de los Warriors.

Foto: @nba
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Fueron poco a poco recortando distancia. A poco más de cinco minutos para que acabase el partido estaba 111-112 con ventaja para los Warriors por primera vez desde el 55-56. Ahí fuero intercambiando el liderato a base de canastas hasta que los Jazz se pusieron cinco arriba, 121-116 con apenas dos minutos de juego. Jaque al rey.

Pero los Warriors sacaron a relucir sus siete vidas y de cinco abajo a uno arriba, 121-122. Tiro libre de Gobert anotado y última jugada de los Warriors tras pizarra de Kerr, que pocas veces suele fallar pero esta vez fue salvado por un 'tercero' que pasaba por allí: saca Jerebko para Curry, Steph levanta la cabeza y busca un tiro sencillo de Durant de dos, que había tendido una noche de locura. El ‘35’ fallaba, pero ahí estaba la mano de Jerebko para en el rechace hacer la canasta de la victoria con 0.3 en juego. Ese tiempo fue insuficiente para que los Jazz hiciesen un ataque que impidiese lo que ocurrió, la segunda victoria de Golden State tras uno de los mejores partidos en lo que llevamos de año.

En esa victoria destacó un tremendo Durant con 38 puntos, 7 asistencias y 9 rebotes, Curry le acompañó con 31 puntos y 8 asistencias, Green acabó con 14 y 9 rebotes, Thompson llegó a los 12 con 0/2 en triples y 10 más fueron para Jonas Jerebko, el verdugo de sus excompañeros.

Por parte de unos increíbles Jazz, Ingles se quedó en 27 puntos con 7/11 en triples, el ‘niño’ Mitchell llegó a los 19 puntos en una mala noche con 7/23, Crowder acabó con 17 puntos y 7 rebotes, 16+11 para Gobert, 13 para Exum y nuestro ‘ÑBA’ Rubio logró un doble-doble de 13 puntos y 10 asistencias, la máxima del partido.

A continuación un resumen del partido: