Walter Tavares está llamado a ser una pieza clave del Madrid en esta Copa del Rey. Debido a su enorme altura y movilidad es el center dominante de la competición. Si consigue intimidar en ambas zonas sin cargarse de faltas los de Laso tienen camino ganado para llegar lejos en su asalto al torneo.

Para el gigante de Cabo Verde todo el equipo (con la baja de (Thompkins y la duda de Llull) ha podido entrenar bien estos días previos y pulir errores: "El equipo llega muy bien después de cuatro buenos días de entrenamiento. Hemos intentado corregir los errores que hemos tenido en algunos partidos y eso nos va a ayudar para estar muy bien en la Copa".

Un derbi para empezar

El pívot merengue está muy centrado en el primer partido que les enfrentará al Estudiantes. Sabe que ambos comparten el factor cancha como locales, y lo primero es ver quien rompe la maldición de no perder en casa: "El equipo está de diez porque siempre se prepara para estos momentos, donde lo hacemos bien. Tenemos a gente con mucha experiencia, que ha jugado muchas finales y sabe cómo hacerlo. La gente habla de la maldición del equipo que juega en casa y vamos a intentar estar concentrados y cambiar esa historia".

En cuanto al rival lo considera realmente peligroso, tanto por el apoyo de su afición como por lo motivados que juegan siempre ante el Madrid: "Siempre hay ganas de jugar contra Estudiantes, que es el derbi de Madrid, y después de haber perdido vamos a tener más precaución, estar más atentos e intentar hacer las cosas mejor. La eliminatoria se va a decidir por detalles porque ya hemos jugado antes contra ellos y habrá que hacer mejor las cosas en defensa. El Palacio va a estar dividido y va a ser un gran partido para la Comunidad de Madrid con dos grandes equipos".